Mario Pergolini sorprendió a la audiencia de Otro Día Perdido (Eltrece) al admitir públicamente el daño que provocó a Susana Giménez, una de las figuras más influyentes de la televisión argentina. El conflicto, originado hace más de veinte años, resurgió cuando el presentador expresó su intención de reparar el vínculo.
Las autocrítica de Mario Pergolini
El tema salió al aire el miércoles 20 de agosto, durante una conversación con Susana Roccasalvo, quien le sugirió que le pidiera perdón “de rodillas”. Allí, Pergolini hizo una autocrítica tajante: “Susana tiene derecho a estar enojada. Nosotros fuimos muy crueles con ella. Hicimos chistes con cosas que no correspondían”.
Según explicó, su comportamiento se enmarcaba en una época en la que el humor televisivo habilitaba excesos que hoy considera inadmisibles. “Eran otras épocas… reconocemos que hacíamos chistes que no había que hacer y teníamos cierta saña sobre todo con los que eran número uno”, reflexionó frente a su equipo y la invitada.
La tajante respuesta de Susana Giménez
Sin embargo, la respuesta de Giménez no dejó margen de acercamiento. Consultada por los cronistas de LAM (América TV) sobre la posibilidad de reconciliarse o asistir al programa de Pergolini, la conductora fue contundente: “Jamás lo veré. No iría nunca a su programa ni aunque me pida perdón de rodillas”. En sus declaraciones, recordó el malestar que le generó el trato recibido en los años en que Caiga Quien Caiga lideraba el rating: “Me odiaba, siempre hablaba mal de mí”. Para la diva, el enojo es profundo y no tiene intención de revertirse.
Durante el programa, Laila Roth, panelista de ODP, le señaló a Pergolini: “Eras muy de hablar del cuerpo ajeno”. El conductor asintió y reconoció: “Sí, totalmente. Eran otras épocas, realmente, esto no limpia ninguna excusa”. Luego insistió en que la responsabilidad fue exclusivamente suya y que, aunque el contexto de entonces era distinto, hoy no repetiría ese tipo de humor. “Tiene toda la razón del mundo en estar enojada. Ojalá entienda que fue una maldad de ese momento y que hoy en día no pienso así”, expresó.
Susana Roccasalvo lo instó a dar un paso más y propuso intentar un acercamiento en vivo, mientras los panelistas especulaban con la chance de “ablandar” a Giménez. Sin embargo, Pergolini admitió que la última palabra la tiene ella y que no espera forzar una reconciliación. “Lo haríamos, pero está muy enojada”, concluyó.