9 de octubre de 2025 - 00:00

Alumnos y un compromiso ambiental como desafío

Un recientemente creado Programa de Compromiso Ambiental Educativo, sancionado por la Legislatura, prevé que voluntarios de los ciclo primario y secundario, actúen como promotores de la defensa del ambiente y los recursos naturales imprescindibles. Es una herramienta más para proteger la casa común que es la Tierra.

La educación provincial mendocina, en los niveles primario y secundario, se ocupa durante el ciclo lectivo de instruir a los cursantes sobre las mejores normas de cuidado del ambiente.

Para citar un ejemplo, podemos mencionar el programa Aprender con energía sostenible, en la que participaron más de 20.000 estudiantes mendocinos y que se realizó el año pasado.

Por eso debe apoyarse la rápida implementación en los establecimientos educativos del Programa de Compromiso Ambiental Educativo, impulsado por las senadoras las senadoras Yamel J. Ases y Mariana Zlobec (de UCR), con la acumulación de dos iniciativas, una de Verónica Valverde (PJ) y otra de Laura Balsells Miró (PRO).

El plan de compromiso ambiental entre los estudiantes se formalizará con la implementación de voluntariados ambientales, el juramento ambiental y también se creará la bandera del compromiso ambiental en las instituciones educativas.

El objetivo es potenciar e institucionalizar la acción climática en los entornos educativos; garantizar la participación de la comunidad educativa en la acción ambiental, como agente multiplicador de buenas prácticas; y posibilitar experiencias de formación e intercambio entre jóvenes desde el pensamiento crítico e integral.

El Ministerio de Educación de la provincia y la Dirección General de Escuelas (DGE), actuarán como autoridad de aplicación.

Los estudiantes que asumirán el compromiso voluntario por el ambiente serán los cursantes del sexto grado de nivel primario, y los del tercer año de la secundaria.

Sumamos en este comentario el antecedente de lo dispuesto por la Asamblea General de las Naciones Unidades, que, en julio de 2022, declaró que todas personas tienen derecho a un medio ambiental saludable, como paso determinante para contrarrestar el alarmante declive mundial de la naturaleza.

En ese camino, pensamos que sería muy interesante la promulgación de una declaración mundial del medio ambiente, con el mismo rango vinculante de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, aprobada por la ONU en 1948.

Habrá que reiterar que el “derecho humano a un medio ambiente limpio, sano y sustentable” fue reconocido formalmente por la Asamblea General de la ONU. Ese reconocimiento se basa en décadas de esfuerzos, comenzando con la declaración de Estocolmo de 1972, y posteriormente con la declaración de Río de Janeiro de 1992. Todas estas posiciones ponen de manifiesto la relevancia de la protección ambiental, el bienestar humano y el desarrollo sostenible.

En ese camino está enfocada la propuesta local, con el fuerte componente de promover el compromiso ambiental en lo más sano de la comunidad, los niños y niñas de la primaria y los jóvenes de la secundaria.

El debate para llegar a la aprobación de esta norma fue presenciado por alumnos de la escuela de nivel medio 4-090 “Profesor Osvaldo Pinto”, del distrito La Dormida (Santa Rosa), quienes de alguna forma tienen el desafío de convertirse en primeros militantes de la causa del ambiente, al que de hecho ya efectuado contribuciones desde el ámbito rural donde está ubicado el establecimiento.

Esperemos que, por medio de la aplicación de esta ley, y sumado a lo que ya se hace en el sistema educativo, se sumen muchas acciones sobre cómo actuar para cuidar los recursos naturales como el agua, el suelo y los árboles.

LAS MAS LEIDAS