Los directivos de las tres cámaras del sur mendocino enviaron una carta al nuevo presidente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), Nicolás Bronzovich, en la que solicitan que los cambios que se realicen deben ser consensuados con los actores de las diferentes regiones del país donde la institución está presente. Esta semana, el vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció la implementación de “un plan de modernización de este organismo clave para el desarrollo del sector agropecuario del país”, que incluye la reducción de puestos de trabajo y la venta de edificios y tierras.
Adorni planteó que los objetivos del INTA fueron desvirtuados en la gestión anterior, ya que, desde 2007, el organismo se involucró en temas no relacionados directamente con la productividad agrícola, como cuestiones de género, los falsos mapuches y la agricultura familiar. “Además, el 50% de sus 6.852 empleados actuales ingresó durante los gobiernos de Cristina Fernández entre 2007 y 2015″, añadió.
El vocero también cuestionó el uso de los recursos del INTA, al señalar que “de los US$ 250 millones al año que recibe el INTA, el 90% se usa para pagar sueldos”. A su vez, señaló que la participación privada en las investigaciones del instituto es actualmente inferior al 10% y que el objetivo es aumentar esta cifra al 30% para 2027.
Con respecto a estos cambios, desde las cámaras empresarias del sur de Mendoza señalaron que comparten “la necesidad de adecuación de las instituciones públicas a la actualidad, económica, productiva y social, considerando que las instituciones deben estar al servicio del sector productivo argentino”. Pero también señalaron que los cambios que se realicen deben ser consensuados con los actores de las diferentes regiones del país donde el organismo está presente, ya que participan por intermedio de los Consejos Locales Asesores.
“Nuestras cámaras, representantes de las actividades productivas de economías regionales y agroexportadoras, mantienen un vínculo estrecho con los técnicos del INTA, desarrollando en forma conjunta proyectos relacionados con la cadena agroexportadora de ciruela industria, ganadería irrigada y de zonas áridas, vitivinicultura, gestión organizacional y proyectos de optimización de uso del recurso hídrico; además, se mantiene la zona sur libre de la mosca del mediterráneo y con baja incidencia de lobesia botrana, y también la zona semillera Malargüe para papa y ajo, gracias al aporte de INTA”, resaltaron en el escrito.
Asimismo, destacan que “el INTA, a lo largo de los años, ha invertido en la formación de su personal, generando equipos técnicos de especialistas que constituyen la principal fortaleza institucional, por lo que consideramos que debe preservarse este recurso para que, mediante alianzas estratégicas puedan aportar al crecimiento de las empresas que motorizan el desarrollo de las regiones”.
El texto fue presentado con la firma de Gabriel Brega, presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Agropecuaria de San Rafael; Ramiro Labay, presidente de la Cámara de Comercio, Industria, Agricultura, Ganadería, Vial y Servicios de General Alvear; y Marcelo Schajnovetz, presidente de la Cámara de Comercio y Afines de Malargüe.