Cae el consumo de lácteos por aumentos de hasta 150%

Hay una migración hacia segundas, terceras y cuartas marcas. En los primeros dos meses del año los supermercados sufrieron una retracción del 7% en las ventas de estos productos.

Hay sólo cuatro tambos en actividad en Mendoza, con precios por debajo del promedio general del mercado. / Foto: Orlando Pelichotti
Hay sólo cuatro tambos en actividad en Mendoza, con precios por debajo del promedio general del mercado. / Foto: Orlando Pelichotti

Un estudio privado realizado por una empresa del sector lácteo reveló que el 86% de la población adulta argentina no consume la cantidad de lácteos recomendados por día. La cifra ha empeorado en los últimos años y en el análisis se mencionan causas culturales, como cambios de hábitos nutricionales. Sin embargo, en un contexto de recesión económica, no se puede negar que la caída del consumo se debe en gran parte a los aumentos de precios y la pérdida del poder adquisitivo de los salarios.

De acuerdo a los relevamientos oficiales, los lácteos registraron aumentos del 34,9% en promedio en el último año, por debajo de la inflación, pero algunos productos en particular alcanzaron subas que superan el 150%. Además, en los últimos cuatro meses, algunos artículos tuvieron incrementos por encima del 30%.

Los incrementos en los precios no se han dado de forma pareja. A principios de 2020, un relevamiento de Los Andes daba cuenta de que era posible comprar manteca por fuera del programa Precios Cuidados a $75 (200 gramos), mientras que un año después, la más económica tenía un precio de $92,70 (23,60% en un año). A la fecha, el precio más bajo supera los $137 (32% más en solo cuatro meses).

Por su parte, el queso cremoso registró un incremento de hasta tres veces por fuera del programa oficial en el último año. En 2020 se vendía a un valor de $144 por kilo (la opción más económica), luego pasó a $360 por kilo a comienzos de 2021 y hoy, en las grandes cadenas de ventas, se exhibe por arriba de $410 (184% de suba de una punta a otra).

Otros productos, como el yogur, han mantenido su valor en lo que va del año, si se toma en cuenta la opción de precio acordado ($99,50 por kilogramo), aunque las marcas premium pueden costar hasta $169 por un producto de similares características y sabores. Por su parte, el queso rallado saltó de un valor de $200 en 2020 a $232,60 a comienzos de este año en su presentación por 190 gramos, lo que implica un incremento de solo 16,3% en doce meses (2020 a 2021). Luego, en los primeros cuatro meses de este año, subió a $248,90.

Finalmente, la leche entera saltó de $42,46 a $52,20 en Precios Cuidados (22,94% de incremento). Fuera del programa, la opción más económica pasó de $38 a $48,86 (28,58% de ajuste) en un año, y desde febrero hasta junio, la más económica que se consigue pasó a valer $70,20 (43,60% más en solo cuatro meses), aunque en la práctica, se encuentra mayor stock por alrededor de $100, y resulta difícil comprar por menos de ese valor, si no se accede a promociones del tipo 2x1.

Caída de ventas

De acuerdo con el economista José Vargas, titular de Evaluecon, la suba que han venido registrando los lácteos en los últimos tiempos, han provocado que las familias modifiquen sus patrones de consumo, pasando desde las primeras marcas, a las segundas, terceras y cuartas. “Por otro lado, la caída en los salarios genera que las familias intenten hacer un equilibrio, y resignan algo de lácteos para consumir, carne o pan, e ir equilibrando los mínimos requisitos nutricionales”, detalló.

También Damián Di Pace, director de la Consultora Focus Market, se refirió a los cambios en los patrones de consumo: “Las segundas, terceras y cuartas marcas, que eran potestad de la clase media baja o sectores económicos en situación de pobreza, han comenzado a consumirse por población de mayores recursos. La crisis ha llegado a todos los bolsillos y la racionalización del gasto también alcanza a la administración del gasto hogareño de los más pudientes. Argentina es un país con una vara muy baja para medir el ingreso de su población, luego de casi cinco años de caída de la economía y diez años de retracción en sus niveles de inversión. La búsqueda del precio ante la evolución es recurrente en todos los niveles socioeconómico”, explicó

Un estudio de la consultora demostró que en las zonas de Nivel Socioeconómico Alto, las primeras marcas tuvieron un retroceso en su elección del 12% ,al comparar 2021 frente a 2019. Por su parte, creció 8% la elección de las segundas marcas, 1% el de las terceras marcas y 60% el de las marcas propias del supermercados tomando en consideración la misma base de productos y surtido en el período investigado (2019 a 2021).

Por otro lado, un informe del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) indica que las ventas de productos lácteos se contrajeron 7% en los supermercados de la provincia durante los primeros dos meses del año, en comparación con igual mes del 2020.

En enero, la facturación de los súpers por venta de lácteos había mejorado un 5% en términos reales, pero en febrero la situación cambió y las ventas de contrajeron un 15%. Esto demuestra que el consumo general de esta clase de productos está bajando, más allá de la migración a marcas de menor precio.

Del tambo a la fábrica

En Mendoza todavía quedan cuatro tambos en actividad, y dos de ellos pertenecen a Leonardo Guercio (Bermejo y el Borbollón), otros dos están emplazados en Lavalle y San Martín. Y la realidad de los precios en ellos es muy distinta a la que se observa luego en las grandes cadenas de consumo.

Así, en la búsqueda de un menor precio, el propietario de dicho tambo, Leonardo Guercio, advirtió un nuevo aumento en la cantidad de consumidores que se acercan a comprar el producto directamente “en tranquera” (sin pasar por las fábricas que la procesan y fraccionan).

En su caso, la leche se vende en la puerta del tambo directamente a los consumidores en $50, precio que asegura le sirve por el momento, y por lo menos por los próximos 30 días, cuando tenga que volver a comprar maíz, y si este sigue subiendo, se verá obligado a corregir los precios. “Hay que mantener los precios porque los salarios no se han movido, y la gente no tiene dinero”, destacó.

Acuerdo para aumentar el consumo

En este marco, la Secretaría de Comercio Interior del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, en conjunto con la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, dependiente del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, sellaron a fines de mayo un acta de acuerdo con asociaciones empresarias de la industria láctea para ampliar los volúmenes de producción y abastecimiento en el mercado interno y sumar 32 nuevos productos lácteos al programa Precios Cuidados.

“Nuestro objetivo es recuperar el consumo de lácteos principalmente en los sectores más vulnerables, por eso a partir de hoy y de la puesta en práctica de la Ley de Góndolas, queremos lograr que cada vez haya más producción y abastecimiento de productos lácteos con presencia en los supermercados”, expresó la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, al respecto.

Respecto a las categorías de productos lácteos, en el caso de las leches fluidas, se refuerza la oferta de leche refrigerada y se robustecen en un 80% las opciones de mercado de leches no refrigeradas. En este segmento se incluye la mayor cantidad de empresas involucradas en el convenio.

Consumir 3 porciones o más de lácteos al día

Este 1° de junio se celebró el Día Mundial de la Leche, establecido por la Organización de las Naciones Unidas para incentivar el consumo de este alimento. En el marco de este día y para concientizar sobre el tema, Mastellone Hnos presentó junto a Kantar, os resultados de la encuesta sobre “Los Argentinos y el consumo de lácteos” realizada a fines del 2020 en todo el país.

De la misma se desprende que 3 de cada 10 argentinos saben que se sugiere consumir 3 porciones de lácteos al día según la recomendación de las Guías Alimentarias de la Población Argentina (GAPAS), del Ministerio de Salud de la Nación. Sin embargo, pocos lo aplican en su dieta diaria. En cuanto a su consumo, se mantiene la tendencia ya vista en años anteriores: solo un 14% de los argentinos declara consumir 3 porciones de lácteos o más por día, una tendencia que se sostiene desde 2018.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA