Desde el aire, una experiencia única

El enviado especial de Más Deportes fue invitado por ASO para vivir la penúltima etapa del Rally Dakar 2015 desde el cielo. En cada jornada, distintos medios del todo el mundo tienen la chance de sobrevolar las especiales, presenciar largadas y llegadas. En fin, vivir la carrera “in situ”.

En esta ocasión, abordamos uno de los helicópteros que el Ejército Argentino puso a disposición de la organización. Se trata de uno de los míticos Bell H1-1A, aquellos que muchos recordarán por distintas series televisivas y otros tantos conflictos bélicos que mejor ni nombrar.

La jornada, como todos los días, arrancó bien temprano. La cita era para las 6.20 en centro neurálgico del Dakar, el PCO. Junto a Diego Durruty (revista Corsa), estuvimos en horario y tras esperar por otros medios franceses algunos minutos, encaramos al aeropuerto de Termas de Río Hondo.

El sol recién había comenzado a brillar en el horizonte, cuando sin pensar demasiado ya estábamos en el aire dibujando el recorrido hacia el punto de la largada de la especial, donde ya esperaban las motos y “quads” que habían comenzado el día a las 4.50.

El Bell H1-1A es uno de los helicópteros más usados en el mundo por los distintos ejércitos. Con una velocidad promedio de 200 km/h, en poco más de una hora de vuelo aterrizamos en un improvisado helipuerto.

Una detención obligada

Después de disfrutar del arranque de la especial llegó el momento de volar otra vez. Esta vez el destino era el CP1, el primer control de paso. Eso sí, antes hubo que recargar combustible porque el tanque lleno, poco más de 750 litros, solo alcanzan para 2 horas y media.

En el puesto de control pudimos observar varias de las motos pasar y también algunos cuatris. Pero cuando estábamos disfrutando del paso acelerado de los pilotos, otra vez el llamado para subir al Bell.

Así fue durante el día. Subiendo y bajando en distintos puntos clave de la carrera, a la que observamos varias veces desde el cielo celeste, que se dejó ver después de varios días grises y con lluvias importantes.

La jornada para Más Deportes fue de prácticamente 12 horas arriba del helicóptero, desde donde pudo observar la carrera desde otro punto de vista. Una experiencia única e irrepetible.

COMA Y SONIK, CERCA DE LA GLORIA

El australiano Toby Price ganó ayer en motos, pero el título de campeón le quedó servido a su compañero de equipo, el español Marc Coma, que terminó sexto y va por su quinta corona.

Price triunfó entre Termas de Río Hondo y Rosario sobre 194 kilómetros de especial por sobre los pilotos de Honda, el español Joan Barreda Bort y el portugués Paulo Goncalves.

Mientras, en cuatriciclos, el francés Christophe Declerck se impuso por segundo día consecutivo, pero con su quinto puesto el polaco Rafal Sonik se encamina hacia la victoria final ya que en los tiempos globales aventaja por casi tres horas al cordobés Jeremías González Ferioli, hasta ahora el mejor argentino entre todas las divisionales de la competencia más difícil del mundo.