El Nottingham Forest fue testigo de una jugada de preocupación luego de que Taiwo Awoniyi fuera ingresado en terapia intensiva. El jugador tuvo que ser intervenido quirúrgicamente de emergencia por una complicación abdominal. El episodio ocurrió tras el empate ante Leicester por la Premier League, donde el atacante recibió un impacto que pudo haber comprometido su vida, según fuentes médicas.
En el encuentro, el deportista de 27 años chocó contra uno de los postes y luego se mantuvo en cancha unos minutos más. En principio, volvió al juego tras la atención médica, pero posteriormente fue reemplazado. Una vez finalizado el partido, los médicos del club detectaron la magnitud del daño, lo que motivó una cirugía inmediata.
Desde la institución comunicaron que el futbolista evoluciona de forma favorable, sin embargo, en el equipo estalló la polémica. La decisión de mantenerlo en cancha generó tensión entre el dueño del club, Evangelos Marinakis, y el entrenador, Nuno Espírito Santo. Según trascendió, hubo reproches cruzados por lo que se consideró una exposición innecesaria.
De acuerdo al comunicado oficial, el club subrayó la postura reflexiva del propietario: "La gravedad de la lesión de Taiwo Awoniyi es un poderoso recordatorio de los riesgos físicos que conlleva el fútbol y de por qué la salud y el bienestar de un jugador siempre deben ser nuestra prioridad". También remarcaron el enfoque familiar que impulsa Marinakis dentro del plantel.
Además, la molestia dentro del vestuario también respondió a la presión deportiva. Con todos los cambios realizados, el cuerpo técnico optó por mantener al jugador en el campo, priorizando el objetivo de alcanzar puestos europeos. Esta decisión desató el conflicto interno tras el pitido final.