Si tenés un rastrillo viejo y pensabas tirarlo, esperá un segundo. Con un poco de reciclaje, algunos trucos y creatividad, podés transformarlo en un elemento de decoración para tu hogar. No solo es una idea original, sino que también le darás una segunda vida a un objeto olvidado.
Retirale el mango para quedarte solo con la parte metálica y sus dientes. Si tiene óxido, pasale una lija para suavizar la superficie y evitar que dañe las copas.
Si querés darle un toque más decorativo, usá pintura en spray del color que más te guste. Aplicá varias capas finas para un acabado prolijo y dejalo secar bien antes de seguir.
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Reciclaje paso a paso en casa
3. Elegí el lugar para colgarlo
Buscá una pared donde querés instalarlo. Puede ser en la cocina, en un bar casero o en el comedor. Asegurate de que quede a una altura cómoda para colocar y retirar las copas.
4. Marcá y perforá
Colocá el rastrillo en la posición deseada y marcá con un lápiz los puntos donde irán los tornillos. Con el taladro, hacé los agujeros en la pared y colocá los tarugos para que quede bien fijo.
5. Instalalo
Atornillá el rastrillo en su lugar asegurándote de que quede firme y nivelado. Probá moviéndolo suavemente para verificar que esté bien sujeto.
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Reciclaje paso a paso en casa
6. Colocá las copas
Ahora solo te queda colgar las copas en los dientes del rastrillo. Su forma curva permitirá que se mantengan seguras, además de darle un toque rústico y original a tu espacio.