Si hay una combinación que nunca falla en la pastelería argentina es la del coco con el dulce de leche. Y si a eso le sumamos una masa suave, esponjosa y con un leve toque cítrico, el resultado es simplemente irresistible. Los alfajores de coco son una de esas delicias que nos transportan a la infancia.
Esta receta tiene todo lo que nos gusta: una textura que se deshace en la boca, el sabor inconfundible del coco y un relleno generoso de dulce de leche que los hace aún más tentadores. Además, el toque de ralladura de limón les da un aroma especial, equilibrando el dulzor y aportando frescura.
Lo mejor de todo es que son muy fáciles de hacer. No necesitás ser un experto en pastelería para lograr alfajores caseros que compitan con los de cualquier confitería. Eso sí, te advierto algo: una vez que los pruebes, no vas a poder parar de hacerlos.
Para el relleno
- Dulce de leche cantidad necesaria
- Opcional: crema de chocolate o dulce de membrillo espeso
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El paso a paso para los alfajores de coco y dulce de leche
- En un bowl grande, batir la manteca pomada con el azúcar hasta obtener una crema blanquecina y aireada. Agregar la esencia de vainilla y la ralladura de limón para perfumar la mezcla.
- Batir los huevos en otro recipiente e ir agregándolos de a uno a la mezcla de manteca y azúcar, batiendo bien después de cada adición.
- Tamizar juntos la harina, el almidón de maíz, la sal, el polvo de hornear y el bicarbonato de sodio. Agregar el coco rallado y mezclar.
- Hacer una corona con los ingredientes secos y en el centro agregar la preparación de manteca y huevos. Integrar con las manos sin amasar demasiado. La masa debe quedar húmeda, pero no hay que agregar más harina.
- Colocar la masa entre dos hojas de papel manteca o film y estirar hasta obtener un espesor de 5 mm. Llevar a la heladera por al menos 2 horas (se puede dejar hasta 24 horas).
- Con un cortapastas o un vaso, cortar círculos de aproximadamente 4 cm de diámetro. Unir los recortes y repetir el proceso. Disponer las tapitas en una placa enmantecada, espolvorear con un poco de coco rallado y hornear en horno precalentado a 170°C durante 12 a 15 minutos.
- Una vez frías, rellenar las tapitas con dulce de leche o, si querés variar, con crema de chocolate o dulce de membrillo espeso.
