Con mayor emisión, producto del aumento de la inflación en Argentina, los billetes de mayor denominación comienzan a ser los más utilizados por los ciudadanos. Sin embargo, a mayor demanada también se incrementan las estafas.
Con mayor emisión, producto del aumento de la inflación en Argentina, los billetes de mayor denominación comienzan a ser los más utilizados por los ciudadanos. Sin embargo, a mayor demanada también se incrementan las estafas.
Con la creciente producción de billetes de 1000 crece también la cantidad de oportunistas. En las calles, es más común encontrarse con billetes apócrifos, que traen dolores de cabeza para aquellos que recibieron uno sin haberse dado cuenta.
Para evitar ser engañado es necesario tener en cuenta algunos consejos:
El papel moneda es diferente al tacto que el papel común. Tiene una combinación de apereza y flexibilidad fáciles de identificar. Por ello, si se lo nota muy suave o demasiado rígido, hay que desconfiar.
Además, hay que poner el billete de y pasar el dedo sobre la figura del hornero y sobre las dos flores que están junto a él. Estas partes, por su impresión calcográfica, deberían tener un relieve perceptible.
Por la impresión al mover el papel moneda, algunos elementos parecen moverse y otros cambian de color. En el frente, los números y las letras que indican el valor del billete están hechos con una tinta que pasa del verde al azul al cambiar el ángulo de incidencia de la luz. El hilo de seguridad principal, de color amarronado, aparece expuesto en algunos tramos y en otros cubierto por el papel.
Observarlo con una fuente de luz detrás del billete permite verificar tres medidas de seguridad. La marca de agua en la que se debe ver un hornero con un número 1000. El hilo de seguridad secundario, más fino que el principal y que solo se ve a contraluz, de lado a lado en la zona del hornero. En su interior debe decir: “$1000 BCRA”.
Motivo de complementación. Junto a la marca de agua, un dibujo de la huella del hornero, que parece a medio pintar, termina de colorearse al observar el billete frente a la luz.
Los billetes verdaderos tienen palabras y números impresos en microletras tan pequeñas que sólo pueden distinguirse con lupa o acercando el ojo al papel. Si no hay nitidez en estos elementos, lo más probable es que el billete sea falso.
Las microletras se pueden observar en:
Si todavía quedan dudas, se puede exponer el billete a la luz ultravioleta para asegurarse de que aparezcan las medidas de seguridad restantes: