Dormir con el aire acondicionado encendido es casi inevitable durante las noches de calor en gran parte de Argentina. Sin embargo, configurarlo a temperaturas extremas puede provocar mal descanso, sequedad en las vías respiratorias y resfríos, además de aumentar el consumo eléctrico. Según especialistas en climatización y salud, existe un rango ideal que permite dormir bien sin afectar al organismo.
Además, el cuerpo reduce su temperatura de forma natural al dormir, por lo que un ambiente excesivamente frío interrumpe los ciclos profundos del sueño.
Ni en 22° ni en 25° cuál es la temperatura ideal del aire acondicionado para dormir bien y no resfriarse (3)
Por qué 26 °C puede no ser suficiente
Aunque 26 °C es una temperatura eficiente para el día, por la noche puede resultar insuficiente para conciliar el sueño, sobre todo en zonas con alta humedad.
Cuando el ambiente está pesado:
el sudor no se evapora correctamente,
aumenta la sensación térmica,
el descanso se vuelve superficial e interrumpido.
Esto explica por qué muchas personas sienten calor incluso con el aire encendido a esa temperatura.
La temperatura ideal para dormir bien
Según consensos médicos y recomendaciones técnicas, la temperatura ideal para dormir con aire acondicionado se ubica entre 23 °C y 24 °C.
Este rango:
acompaña la regulación térmica natural del cuerpo,
evita resecar el ambiente,
reduce el riesgo de resfríos,
mejora la calidad del sueño,
mantiene el confort sin frío excesivo.
En dormitorios, este rango suele ser el más equilibrado tanto para adultos como para niños.
Ni en 22° ni en 25° cuál es la temperatura ideal del aire acondicionado para dormir bien y no resfriarse (1)
El rol clave del modo Sleep y la humedad
Los especialistas recomiendan activar el modo Sleep, ya que ajusta gradualmente la temperatura durante la noche y evita enfriamientos bruscos.
Además, en noches húmedas conviene usar:
modo Dry, o
aire a 23–24 °C + ventilador de techo, para reducir la humedad sin enfriar de más.