A diez días de las elecciones legislativas del 26 de octubre, la Cámara Nacional Electoral (CNE) aceptó el pedido de La Libertad Avanza (LLA) para reimprimir los afiches informativos que se exhibirán en los establecimientos de votación en la provincia de Buenos Aires, de modo que lleven la imagen de Diego Santilli como primer candidato a diputado, en reemplazo de José Luis Espert, quien renunció a su postulación.
La decisión revoca un fallo previo de la Junta Electoral bonaerense, que había rechazado la solicitud presentada por el oficialismo.
Qué implica la medida
La CNE aclaró que los afiches o carteles informativos no forman parte del material esencial para la constitución de las mesas de votación, como sí lo son las urnas, los padrones o las boletas, y que, por lo tanto, pueden ser distribuidos por un "circuito paralelo" sin afectar los plazos ni el desarrollo normal de los comicios.
En total, se trata de unos 40.000 afiches que serán reemplazados en los próximos días en todo el distrito bonaerense. Las boletas únicas, en cambio, no serán reimpresas, dado que ya se encuentran distribuidas y la Cámara consideró que existe una “imposibilidad material” para rehacer las 15 millones de papeletas que se utilizarán en la votación.
Diego Santilli, Javier Milei,
Javier Milei junto a sus candidatos Karen Reichardt y Diego Santilli.
Esto quiere decir que las boletas que estarán en los colegios bonaerenses tendrán la cara de José Luis Espert que renunció a su candidatura tras el escándalo que lo vinculó con el empresario Federico “Fred” Machado, acusado por la Justicia de los Estados Unidos de lavado de dinero y narcotráfico.
El tribunal consideró que "el ciudadano debe ser el centro de la atención de quienes tienen a su cargo la administración de los asuntos públicos" y que "las reglas electorales deben enfocarse en garantizar a la ciudadanía el ejercicio de una voluntad bien clara, sin confusiones".
La Cámara sostiene que para ello se "necesita que la información sea simple y entendible" y "la autoridad electoral debe procurar, en la medida de lo razonable y posible, que la información puesta a disposición de los electores refleje la oferta electoral real y vigente al momento de los comicios, máxime cuando -como en el caso- existen márgenes operativos que permiten adoptar medidas tendientes a ese fin".