Abierta disconformidad con el discurso del Presidente en el Coloquio de Idea

La única buena noticia para los empresarios convocados al foro fue que el Gobierno no piensa devaluar, tocar las cuentas bancarias.

Agenda apretada. Después de participar del 56° Coloquio de IDEA, Fernández festejó el 40° aniversario del Premio Nobel de la Paz otorgado a Adolfo Pérez Esquivel.
Agenda apretada. Después de participar del 56° Coloquio de IDEA, Fernández festejó el 40° aniversario del Premio Nobel de la Paz otorgado a Adolfo Pérez Esquivel.

Alberto Fernández habló con noto conciliador, pero en ningún momento soltó el látigo de sus manos. Esa fue la percepción con la que se quedó una buena parte del auditorio empresarial que ayer participó de la primera jornada del 56º Coloquio anual de Idea.

La única “buena noticia” fue la afirmación del Presidente de la Nación de que no piensa en una devaluación del tipo de cambio oficial y tampoco meterá mano en las cuentas bancarias, en particular aquellas dolarizadas.

Todas las demás afirmaciones del mandatario merecieron objeciones. Algunas se expresaron en tiempo real en el propio chat del evento (entraron unas tres mil personas, según los organizadores) y otras en conversaciones off the récord de ejecutivos, en su mayoría CEOs y presidentes de compañías, con periodistas.

Uno de los puntos que más controversia generaron fue su alusión al decreto presidencial Nº 690 que justificó la regulación de la televisión paga por cable y los servicios de Internet. “La competencia se ha perdido en Internet y en la TV por cable, porque algunos sectores tuvieron ventajas que otros no tuvieron”, dijo. Fuentes de la industria que con 700 empresas, muchas Pyme, emplea a 30 mil personas, rechazaron de plano esa afirmación. “En los últimos 20 años la televisión por cable desarrolló la única red capaz de competirle a la infraestructura de las telefónicas incumbentes. Y que nuestra industria es por demás dinámica, logrando popularizar los accesos de banda ancha, ubicándose ante los usuarios como una opción de alta calidad, logrando significativas bajas en los precios de los abonos y sustanciales aumentos en la velocidad de la conexión”, recalcaron.

Cuando Fernández habló de regular las telecomunicaciones, Miguel Blanco, director de Swiss Medical Group y un ejecutivo que cuando habla representa otras voces dijo: “Sostener que la intervención de la burocracia estatal puede agregar competencia en un sector tan dinámico como las telecomunicaciones es ignorar los efectos negativos de 70 años de intervencionismo estatal en sectores como la energía”.

Pero hubo más. “El problema no es el equipo económico sino las contradicciones políticas”, comentó sin vueltas uno de ellos durante una conversación informal. Hubo coincidencias en destacar lo que algunos consideran un doble discurso y otros simplemente mala gestión.

Por ejemplo, para el tratamiento de las leyes del Conocimiento, de Teletrabajo y del proyecto para regular las telecomunicaciones (Internet, televisión por cable y celulares) se multiplicaron los contactos con el propio mandatario y con sus ministros, en particular con Matías Kulfas.

“Después de eso, salió cualquier cosa”. Algunos todavía guardan una leve esperanza de que la reglamentación del teletrabajo haga lugar a los aportes presentados. “Mudar una tecnológica a Uruguay es lo más sencillo que hay, sólo hay que trasladas las computadoras o comprarlas allá”, amagó un ejecutivo.

La creciente carga impositiva del país es otro tema que en el ámbito de Idea talla fuerte. Se necesita un “mensaje conciliador para que exporte y crezca el país, con confianza e inversiones”, mencionan en el pasillo virtual de Idea. “Pero para eso –como también mencionaron días atrás las automotrices– se requiere una carga tributaria ‘exportable’. La actual nos deja fuera de competencia”, recalcan.

Y de fondo, los empresarios le reclaman a Fernández que, con el impuesto a la riqueza, se duplica la carga tributaria sobre las personas (se gravan las acciones) y ello sí incide inclusive en las Pymes. “Todo esto –abonan– sin que exista la menor predisposición para tener un gasto público que, aún con pandemia, muestra un esfuerzo de la política hacia el sector privado que cada día es más chiquitito”. Lapidario.

Las culpas de Macri y una defensa a la reforma judicial

El Coloquio, que habitualmente se desarrolla en Mar del Plata, por efecto de la pandemia en esta edición adoptó una fisonomía virtual, donde los expositores pueden ser seguidos a través de una plataforma especialmente diseñada pero al mismo tiempo quienes integran el auditorio tiene permitido efectuar comentarios. Numerosas de esas expresiones de altos ejecutivos y dueños de empresas marcaron diferencias con lo que expresaba Fernández. De movida, en los primeros minutos de su mensaje, el jefe de Estado culpó al expresidente Mauricio Macri por el “crecimiento de la pobreza” y la “fuga de divisas” y dijo que ambas cosas se produjeron durante “un tiempo donde el Gobierno decía ser un gobierno preocupado por los empresarios”. También defendió la reforma judicial y la necesidad de que los jueces sean designados por concurso de antecedentes, con aprobación del Senado y promulgación del Ejecutivo. Explicó que si hubiera seguido el criterio de la gestión anterior, no habría puesto la reforma judicial en debate. “Solamente me hubiera quedado callado y hubiera aprovechado los precedentes” del Gobierno anterior.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA