Gagliardo, el arquero de Independiente Rivadavia: “Está todo dado para dar el salto de categoría”

Maximiliano Gagliardo es uno de los hombres más importantes en esta racha de triunfos. “Lo importante es que el equipo gana y lo hace bien”, dijo. Los Azules visitarán a Atlético de Rafaela el sábado desde las 18.

El arquero Maximiliano Gagliardo se ha convertido en uno de los fundamentales en esta etapa en Independiente Rivadavia. Foto: Mariana Villa / Los Andes
El arquero Maximiliano Gagliardo se ha convertido en uno de los fundamentales en esta etapa en Independiente Rivadavia. Foto: Mariana Villa / Los Andes

Es el arquero de los ascensos. A sus 40 años, nadie puede dudarlo. Por eso, cuando Independiente Rivadavia transita un remanso tras el bravo comienzo que lo obligó a una etapa de “rápidos” y turbulencias, Maximiliano Gagliardo vuelve a convertirse en uno de los hombres más destacados del equipo, aportando su experiencia y solidez cuando el partido así lo requiere. Desde su tranquilidad, el arquero llegado desde Barracas Central empuja al equipo desde el fondo y enciende la esperanza de los que gritan desde los cuatro costados, apoyados en un sueño que hoy pisa las 22 unidades, a tan solo cinco de la cima de las posiciones de la Zona B.

Además de ser el jugador de mayor edad del plantel conducido por Alfredo Jesús Berti, Gagliardo acumula tres ascensos en su carrera profesional: consiguió el salto a la Primera Nacional con Los Andes y luego hizo lo propio con Arsenal de Sarandí, en la temporada 2018/2019, y Barracas Central, en la 2021, donde consiguió los ascensos a la Liga Profesional.

Desde su llegada a la entidad del Parque, sostiene sus sensaciones para lo que vendrá y confirma que “está todo dado para dar el salto de categoría”.

Incluso, desde la llegada del nuevo entrenador, Gagliardo sostuvo durante cuatro encuentros consecutivos su arco en cero. Esa racha se cortó el pasado fin de semana, aunque fue triunfo 2-1 ante Estudiantes de Caseros.

El “1″ viene sosteniendo un rendimiento acorde a las expectativas que genera el equipo jornada a jornada y ya salvó en anteriores ocasiones la caída de su valla. Cuando el equipo da un paso adelante, suele incurrir en errores que por ahora fueron bien desconfigurados por el arquero.

Por eso, cuando la semana comienza a desprender hojas del calendario y el plantel azul solo tiene la cabeza puesta en su próximo compromiso (el sábado, desde las 18, frente a Atlético de Rafaela en condición de visitante), la charla con el “1″ leproso quedó establecida de ante mano, asumiendo éste su verdadero rol dentro del equipo: es un DT en el campo de juego.

Respecto de la Crema, uno de los que se armó para pelear arriba y que viene cumpliendo las expectativas, Gagliardo analizó: “Es un rival y un partido muy difícil. Rafaela es un equipo que se hace muy fuerte en su cancha (NdR: ganó cuatro, empató dos y perdió uno). Además, es un equipo que también aspira ascender a la Liga Profesional. Ahora nos toca ir a su cancha y vamos a hacerlo con la convicción de buscar tres puntos que pueden darnos un salto de calidad. Iremos con nuestras armas y nuestras certezas. El equipo está bien y estamos con mucha confianza para lo que vendrá”.

Respecto del último triunfo, dijo: “Fue difícil, pero lo importante para todos es que se logró reafirmar y mantener el nivel de lo que veníamos exponiendo en la cancha. Lo bueno es que también estamos ligando cosas pequeñas que antes no nos venían favoreciendo y eso también ayuda”.

Gagliardo alcanzó el sueño máximo de jugar en la Primera División del fútbol argentino a sus 36 años, cuando se consagró campeón con Arsenal de Sarandí. Allí fue capitán durante varias temporadas y dejó un registro del cual se siente muy orgulloso: mantuvo su valla invicta de forma consecutiva durante 673 minutos. Sin embargo, no es su mejor racha. En Flandria consiguió aguantar sin goles en su valla unos 842 minutos, cuando el equipo de 9 de Febrero disputaba la Primera B Metropolitana.

“Lástima que nos convirtieron ese gol”, dijo en referencia al tanto que significó la apertura del marcador para los de Caseros. Y continuó: “Veníamos manteniendo el arco en cero y eso estaba bueno, porque habla bien del trabajo defensivo. Más allá de eso, lo importante es que el equipo gana y gana bien. Tenemos que demostrar esa solidez como lo hemos hecho hasta ahora. No es fácil, porque los equipos de arriba hacen goles en todos los partidos”.

Sobre cómo se vive puertas adentro esta tranquilidad deportiva e institucional, dijo: “Me parece que las cuatro patas de la mesa están encolumnadas detrás de un objetivo. Los hinchas, los dirigentes el cuerpo técnico y los jugadores vamos todos, día a día, por el mismo objetivo. Y eso se nota. Costó un poco encontrar el equipo, algo que siempre sucede en las primeras fechas, pero lo bueno es que finalmente apareció”.

En cuanto a su presente, donde ha conseguido un rol protagónico en el equipo leproso, manifestó. “Para eso vine; a sumar experiencia y para dar un poco de tranquilidad a mis compañeros. Gracias a Dios se está dando todo eso”.

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