Como licenciado en Turismo y Sommelier estoy convencido de la capacitación y trabajamos fuertemente en ese sentido. No sólo en la actualización de aquellos que ya trabajan en el área de turismo o vinos sino para aquellos que están evaluando desarrollarse en esos sectores.
Para seguir siendo un destino enoturístico reconocido en el mundo, no queda otra que seguir por la senda de la capacitación y la actualización. Buscar la calidad del recurso humano es importante para nosotros porque somos herramientas de servicio y por eso tenemos que dar lo mejor para satisfacer y brindar una buena experiencia a quienes nos visitan.
Hay dos tipos de capacitaciones que la gente debe saber. Una es la teórica, que puede recibir en aquellas instituciones que se dedican muy bien a eso. Pero hay otra, y es aquella que podemos hacer cualquiera de los que nos dediquemos al servicio, que es visitando bodegas, conociendo vinos. La visita de campo y hablar con los protagonistas es un conocimiento que no se va a encontrar en lo teórico. La teoría y la práctica son complementarias.