Fadep pegó en el momento justo

Comenzaron los partidos de vuelta en el Federal C y ayer en la primera fecha de las revanchas, Fadep venció al elenco de Andes Talleres, por 2-1 y quedó tercero, por diferencia de gol e igual puntaje que su rival de ayer, en la zona 2 Cuyana.

Para recordar: Recordemos que en el inicio de este certamen, los Azulgranas habían vencido a los Rojinegros 5-2.
Fadep venía de golear el domingo anterior a El Ñango, por 4-0 y buscaría seguir con la racha.

Es muy grato y agradable  ver jugar al fútbol al estadio de Montecaseros. Es que el piso se presta para jugarla al piso y los talentosos están en un escenario divino. Ayer hubo  talento y dinámica en los dos protagonistas. Fadep necesitaba borrar ese 5-2 del arranque del torneo que le había propinado el gaucho de Minuzzi y su rival de turno. Querían olvidarse del domingo pasado donde Boca le propinó una goleada.

Los primeros 45 minutos fue más Fadep. El elenco de Miguel Nievas hizo más méritos para irse con un gol, pero falló en la definición.

En el complemento, Andes Talleres salió con otra cara. El DT Diego Piozzini envió a sus muchachos a adelantar líneas y manejó el partido a gusto, pero duró hasta que Gonzalo Burgoa se puso el equipo al hombro y empezó a crear jugadas para su compañeros. En una de ésas, Juan Montaña recibió un balón tipo Premier y, como venía, batió al arquero Ligutti. Gol y a otra cosa.

El tanto de la “F” llegó en el mejor momento de Talleres. Después de quebrar el cero Fadep creció y se agigantó y se adueñó de las acciones. Montaña, Rosales y Baldacini se movían por todo el sector de ataque y complicaron en varios pasajes a la última línea de los Azulgrana.

Al promediar el partido, llegó un nuevo estiletazo del elenco Rojinegro (ayer se vistió de verde flúor), Montaña dio varios trancos, se quitó de encima a Acuña, abrió para Jesús Baldacini, que también se quitó una marca de encima  y con un bombazo batió al meta de Andes Talleres: Matías Ligutti.

Para rematarla, a Talleres le expulsaron a Gastón Acuña y ahí terminó por derrumbarse el sistema impuesto por Piozzini. De todas formas por momentos y con más amor propio, la visita intentó buscar en forma desordenada el arco custodiado por Diego Narváez. Si bien el local controló el partido, en un descuido vino el tanto del honor del equipo de calle Minuzzi: por izquierda le bajaron un balón a Paul Martin y éste no erró frente al golero local:gol y a otra cosa.

La reacción de los matadores fue tardía, porque les faltaron minutos para poder empatar. La victoria nunca estuvo en riesgo y Fadep se fue aplaudido por su público y ya piensa en su próximo rival: Boca, que ayer también perdió, pero ésa es otra historia.