Las acusaciones fueron difundidas por la vedette a través de sus historias de Instagram. El posteo causó un enorme revuelo en redes sociales.
La exposición pública entre Mauro Icardi y la China Suárez se intensificó desde que confirmaron su vínculo a principios de enero. Esta vez, la polémica sumó una nueva protagonista: Natasha Rey, una vedette uruguaya que asegura que Icardi, pese a mostrarse estable con Suárez, le envió mensajes con contenido sugestivo.
Los rumores se intensificaron con una historia desde el interior de un auto, musicalizada con “Con Otra”, canción que circula como respuesta de Cazzu a Christian Nodal y Ángela Aguilar. Junto al video, Rey escribió: “Si fue así con ella… También lo será contigo”, dando a entender que Icardi repetiría un comportamiento previo.
Poco después publicó una reflexión en video sobre la importancia de no enviar fotos comprometedoras, lo que preparó el terreno para la publicación clave: una captura de pantalla que muestra un supuesto mensaje privado de Icardi pidiendo un “video para activármela”.
La “evidencia“ incluye el nombre de usuario y la imagen de perfil que coinciden con los que utiliza Icardi en sus redes, aunque no se difundió una conversación completa. La publicación fue acompañada de frases como “Ah, pero yo miento” y “Que le controle el pepito al choma”, en referencia directa a la relación de Icardi con Suárez. En sus declaraciones, Rey acusó a Suárez de haberla tratado de envidiosa y redobló la apuesta: “Yo no necesito plata… ni fama ni nada… tengo todo lo que quiero. Ella es macumbera, yo soy vidente”.
Rey ya había sido noticia en 2014, cuando aseguró que Diego Maradona la contactó para invitarla a Dubai, en un episodio de características similares. Esta vez, volvió a hacer público un supuesto acercamiento no solicitado, mientras simultáneamente Suárez compartía en su Instagram una foto en la ducha, con una remera blanca translúcida con la frase “Don’t be jealous” (No seas celosa), lo que fue leído por muchos como una provocación.
Aunque inicialmente se interpretó como un mensaje dirigido a Wanda Nara, las publicaciones de Rey reorientaron la lectura de ese gesto, ahora percibido como una respuesta preventiva o un intento de marcar territorio.
La secuencia reavivó los cuestionamientos sobre la conducta de Icardi, especialmente por el hecho de que su relación con Suárez comenzó en un contexto polémico cuando él aún estaba casado con Wanda Nara. La narrativa que Natasha Rey expone insinúa una repetición del mismo patrón, lo que motivó especulaciones y comentarios en redes sociales sobre la estabilidad y autenticidad de su actual relación.
Los comentarios de usuarios en redes no tardaron en señalar la posible inconsistencia en el comportamiento de Icardi y en ironizar sobre el destino previsible de esta nueva pareja, recordando que Suárez, en su momento, también fue señalada como tercera en discordia. Las publicaciones de Rey, aunque sin pruebas concluyentes, amplifican la polémica sobre la figura de Icardi.