La actual pareja de Maxi López comentó cómo adaptó su rutina y estilo de vida en las últimas semanas.
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Daniela Christiansson compartió en sus redes sociales una serie de publicaciones en las que narró en detalle cómo ha transitado las primeras 16 semanas de su embarazo. La modelo sueca, pareja de Maxi López y madre de Elle relató cómo fue reconfigurando sus rutinas y prioridades ante el desgaste y los cambios que le trajo esta nueva etapa de gestación.
Christiansson confesó que el primer trimestre fue particularmente difícil: se sintió agotada, sufrió náuseas frecuentes y tuvo dificultades para encontrar momentos de conexión consigo misma. A esta exigencia física se sumó la crianza activa de su hija de dos años, lo cual redujo aún más sus tiempos personales.
"No tenía el tiempo ni la energía para conectarme conmigo misma", escribió. Sin embargo, a las 16 semanas manifestó empezar a sentir una recuperación parcial de su energía, donde insinuó que podría estar llegando el conocido "glow" del embarazo.
La recuperación del equilibrio vino de la mano de nuevas prácticas diarias que, aunque simples, se convirtieron en momentos clave para su bienestar. Detalló que aprovechó una siesta de su hija para realizar una rutina de 20 minutos de ejercicio prenatal, ejercicios de Kegel, cinco minutos de meditación y algunos minutos de respiración. Subrayó que si bien no siempre logra sostener esas actividades de forma regular, la intención es mantenerlas como parte de un compromiso cotidiano consigo misma.
También reflexionó sobre los cambios en sus hábitos alimentarios, donde compartió imágenes de los platos que más la acompañaron en esta etapa: desde vegetales con arroz y hummus hasta comidas más calóricas como pizza o milanesas con puré. Esta diversidad alimentaria, dijo, responde tanto a los cambios de gusto típicos del embarazo como a una búsqueda de equilibrio entre nutrición y disfrute.
Christiansson hizo foco además en el valor del autocuidado como una forma de sostener la estabilidad emocional. "Un poco de deporte, comida saludable, meditación diaria para conectar con las emociones, respirar, renovar la motivación", sintetizó al insistir en que no busca la perfección sino una práctica flexible y compasiva con las oscilaciones propias del embarazo.
Junto con la meditación, el ejercicio físico apareció como una herramienta para procesar emocionalmente la intensidad de la etapa. “El deporte me ayuda a desconectarme y uso la meditación para relajar el cuerpo. Y si llega la motivación, bienvenido sea. Si no, también. El deseo transmutará en éxito y alegría”, escribió en otro tramo del texto.
Ya en publicaciones previas, la modelo había compartido escenas íntimas junto a su hija Elle, como una foto dormidas juntas en un sillón. Allí señaló que en los días más pesados, solo encontraba momentos de descanso durante las siestas de su hija, y destacó lo significativo que resultó para ella ese tiempo compartido. “Ha sido muy cansador, pero disfruté mucho poder dormir con mi hija y estar cerca de ella. Bendecidas”, sintetizó.