Entraron los analistas, filtraron información del exterior y se descontroló: que dijeron

El reciente ingreso de Ceferino Reato a la casa de Gran Hermano dejó a los participantes con una inesperada dosis de realidad. En un momento que sorprendió tanto a los concursantes como a los televidentes, el periodista filtró sin querer información del exterior, alterando la dinámica interna del reality.

El Tarot reveló quién enfrentará a Furia en la finalísima de Gran Hermano 2024

Durante una noche de interacción especial, Reato, junto a Laura Ubfal, Gastón Trezeguet y Sol Pérez, ingresó al formato “congelados” y se enfrentó cara a cara con los jugadores.

En este contexto, Reato comentó sobre la situación económica del país: “Vamos muchachos que afuera está peor, ¡no hay plata!”, refiriéndose a la frase popularizada por Javier Milei. Esta declaración fue recibida con sorpresa y preocupación por los participantes, quienes están aislados del mundo exterior desde diciembre de 2023.

La reacción de Ubfal fue inmediata, al percatarse del desliz de su colega: “¡No lo escuchen!”, exclamó, intentando contener el impacto de la información filtrada. Pero Reato continuó: “Acá es ficción. Disfruten muchachos, muchachas”, reafirmando la desconexión de la realidad que viven los concursantes dentro de la casa.

Los mensajes que dejaron los analistas

La emoción no terminó allí, ya que también se confirmó el regreso de Marcos Ginocchio a Gran Hermano, una noticia que ha enloquecido a los seguidores del programa.

Así es el coqueto monoambiente de Facundo Chen, el amigo de Martín de Gran Hermano

Esta fue la primera vez que los analistas del show, encargados de desmenuzar cada estrategia y movimiento de los concursantes, ingresaron a la casa. Sol Pérez y Gastón Trezeguet fueron los primeros en cruzar la puerta, y no tardaron en destacar “lo lindo” de los participantes y el agradable aroma del hogar.

Trezeguet, conocido por su paso en la primera edición de Gran Hermano, bromeó con besar a Bautista y comentó con humor: “Algo en el freezer voy a tener que escribir”.

Cuando fue el turno de Ubfal y Reato, ambos coincidieron en señalar el desorden en las habitaciones. “¡Qué quilombo!”, exclamó Ubfal, mientras Reato, algo más pragmático, pidió: “¡Che, limpien un poco!”.