En el último año, a junio, la demanda de energía total en la provincia cayó un 2,8%. Así lo revea el informe mensual de la demanda eléctrica de Mendoza y Cuyo, que elabora el Ente Provincial Regulador Eléctrico (EPRE).
Las principales ramas económicas, que son las que demandan el mayor porcentaje de electricidad, tuvieron un descenso en comparación con 2024.
En el último año, a junio, la demanda de energía total en la provincia cayó un 2,8%. Así lo revea el informe mensual de la demanda eléctrica de Mendoza y Cuyo, que elabora el Ente Provincial Regulador Eléctrico (EPRE).
En el acumulado anual, los usuarios generales (pequeños comercios, talleres, industrias y obras en construcción) incrementaron su consumo un 0,4%. Sin embargo, el resto de los usuarios registraron bajas: los residenciales, del 2,6%; los de grandes demandas, del 2,1%; los de riego agrícola, del 8,3%; y el alumbrado público, del 2,7%.
La utilización de energía por parte de los usuarios de grandes demandas se suele tomar como un indicador de actividad económica. En los últimos 12 meses (a junio), tuvieron una disminución de 2,1% en promedio, pero en el acumulado del primer semestre de 2025, el descenso alcanza el 4,1%.
Cuando se analizan las ramas de actividad, sólo la Elaboración de cemento-con una participación del 2,7% en el total de las actividades económicas- tuvo un crecimiento marcado, del 44,9% de enero a junio de 2025. Pero se debe considerar que esta rama terminó el 2024 con una baja del 25,5%, debido a la paralización de la obra pública nacional y la desaceleración de la provincial.
También acumulan una variación positiva en el primer semestre Elaboración de sodas y aguas, del 2,7%, y Conservas de frutas, hortalizas y legumbres, del 0,7%; pero la representación de ambas en el total de la demanda de energía de los usuarios de grandes demandas es del 0,5% y del 1%, respectivamente.
La rama de actividad que ha tenido una mayor caída en la demanda de electricidad en el acumulado de los seis primeros meses del año es Industrias básicas de hierro y acero, que disminuyó 55,2%.
El informe del EPRE detalla que el sector tiene una participación del 2,2% en el total en 2025 y que posee una elevada volatilidad en sus consumos: en 2014 alcanzó el 8,8%, en 2020 (por la pandemia) cayó al 3,3%, en 2022 volvió a subir al 8% y baja nuevamente ahora.
El motivo de este nuevo descenso fue la paralización de las operaciones por parte de Ferroglobe Argentina (Globe Metals SRL) en febrero. Pero también menciona que la empresa ha retomado la actividad en junio.
El presidente de Asinmet (Asociación de Industriales Metalúrgicos de Mendoza), Fabián Solis, señaló que, desde diciembre de 2023 a la fecha, el costo de la energía se ha incrementado por seis. Y resaltó que los impuestos, al no haber bajado los vinculados a las tarifas y como se calculan como un porcentaje sobre el consumo y los cargos fijos, han seguido la misma tendencia.
Sumó que, según Adeera (Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica de la República Argentina), la incidencia de los impuestos en la factura de electricidad alcanza el 46% en promedio en el país, mientras que el 54% restante corresponde a los costos del servicio y los márgenes de la cadena desde la generación a la distribución.
El estudio también mostró que hay una alta dispersión en la carga impositiva según la provincia y el municipio, y que, en Las Heras (Mendoza), alcanza el 55,1%, mientras en otros municipios del país oscila entre el 45,5% (Córdoba) y el 34,9% (María Grande, Entre Ríos).
La Extracción de petróleo crudo, que representa el 22,6% del total, ha tenido un descenso del 5,7% en este primer semestre, que se suma al de 2% que ya había registrado en 2024. El EPRE resalta que, históricamente, la rama tenía una participación del 31% y que la baja está explicada, en gran parte, por la caída en los consumos del yacimiento YPF Vizcacheras (que concentra el 19% de la rama) y que ha tenido una variación acumulada de -45,5% a junio. Se trata del segundo bloque con mayor producción incluido en el Clúster Norte del Plan Andes.
Por otra parte, YPF concretó la cesión de las áreas maduras incluidas en los clústeres Llancanelo, Norte y Sur a operadores privados, con el objetivo de que estas empresas desarrollen inversiones e incrementen la producción, pero aún no están plenamente operativas.
En cuanto a la Refinación de petróleo, la segunda actividad con mayor consumo de energía dentro de las grandes demandas (11,8% en 2025), ha tenido una caída de 2,6% en el primer semestre, en comparación con el mismo periodo del año pasado. Pero cerró 2024 con un aumento del 4%.
La Elaboración de vino es la tercera rama económica de mayor utilización de energía, con el 7,6%, y acumula una disminución del 5% de enero. Fabián Ruggeri, presidente de Acovi (Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas), resaltó que, este año, la provincia tuvo 35% más de uva que en 2024 y que se elaboró en su totalidad, por lo que la variación no responde a que haya caído la producción.
Por el contrario, manifestó que, debido a los significativos aumentos en el valor de la energía eléctrica, las empresas han buscado mejorar la eficiencia energética, ajustando las secuencias de encendido de las máquinas y contratando la energía de manera de evitar el pago de multas.
Subrayó que la tarifa de electricidad representa un costo importante dentro de total de la elaboración. Sumó que, de mayo de 2024 al mismo mes de 2025, la energía aumentó 88%, mientras el IPC tuvo una variación del 43%, el tipo de cambio, de 31% y el precio del vino, del 6%, en el mismo período. Y en los últimos dos años (desde mayo de 2023), el costo energético trepó 730%.
La Fabricación de productos plásticos (que tiene un 3,9% de participación) tuvo una disminución de la demanda del 0,6% en el primer semestre y la Fabricación de envases de vidrio (3,9%) una baja del 1,2%.
En tanto la Venta al por menor en hipermercados, que representa el 2,8% del total de las grandes demandas de energía eléctrica en Mendoza, tuvo una caída en el consumo del 2,8% de enero a junio.
Desde el EPRE detallaron que, en lo que va de 2025, ha habido diversos aumentos. Uno del 3% en febrero, por ajustes tanto en el costo de abastecimiento, de jurisdicción nacional, como en el VAD (Valor Agregado de Distribución), que define la provincia. En marzo hubo un nuevo ajuste, del 1%, establecido por Nación.
En mayo, el costo de abastecimiento subió un 2%, pero la provincia aplicó una baja en el VAD del 6%, producto de un recálculo, que hizo que la tarifa disminuyera un 4%. Luego, en junio y julio, se produjeron nuevas subas nacionales, del 0,9% y del 0,8%, respectivamente.
Esto da como resultado que, en los siete primeros meses del año, el aumento acumulado promedio para los usuarios de la energía eléctrica en la provincia -considerando la baja de mayo- ha sido de 1,6%.
Por otra parte, los primeros días de julio se realizó una audiencia pública para analizar la variación del VAD para el próximo trimestre y se planteó una adecuación de hasta 2,8% en la tarifa para los usuarios residenciales (que representan el 85% del total de usuarios de la provincia). Este porcentaje deberá ser ratificado por el Ejecutivo provincial, antes de su efectiva aplicación en el mes de agosto.