En la misma semana de las novedades de alta repercusión como la reforma migratoria y la quita de aranceles, el gobierno de Javier Milei anunciará este jueves un nuevo esquema fiscal que busca seducir a los argentinos que guardan dólares "bajo el colchón", sin pasar por un blanqueo tradicional. Se encargarán de confirmarlo el vocero presidencial y candidato a legislador porteño, Manuel Adorni, y el ministro de Economía, Luis Caputo.
La iniciativa apunta a facilitar el uso de divisas no declaradas, con una menor carga impositiva y controles menos exigentes, especialmente para profesionales y pequeños empresarios.
“No va a ser un blanqueo”, indicaron a Clarín fuentes cercanas al ministro de Economía.
El Presidente ya dijo que los argentinos que los que "fugaron la plata" no son delincuentes, sino "héroes" y que trabaja para que usen dólares no declarados "sin que nadie los persiga".
A diferencia del Régimen de Regularización de 2024, que condonaba impuestos y penalidades, el nuevo esquema -ideado por un núcleo de no más de diez funcionarios- se enfocará en flexibilizar los requisitos de las declaraciones juradas, especialmente en el Impuesto a las Ganancias.
Cambios clave en Ganancias para autónomos
El foco estará puesto en los trabajadores de la cuarta categoría -unos 390.000 contribuyentes- que hoy tributan Ganancias por ingresos mayores al tope del monotributo, es decir, más de $6,8 millones mensuales. Son profesionales, directores de empresas y dueños de minipymes. Para ellos, se eliminarían algunas de las exigencias más complejas de la declaración jurada.
Según adelantó el tributarista Sebastián Domínguez, una de las principales modificaciones sería la eliminación de la obligación de justificar el patrimonio con detalle: ya no habría que declarar los bienes al 31 de diciembre ni justificar el dinero utilizado durante el año (el llamado “monto consumido”). Además, si el contribuyente se adhirió al Régimen Especial del Impuesto a los Bienes Personales, tampoco tendría que detallar sus activos.
La Ley de "blanqueo de capitales” entrará en vigencia el lunes
Dólares bajo el colchón: el Gobierno busca simplificar el impuesto a las Ganancias
En otras palabras, se trata de reducir los datos que hoy utiliza la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) para hacer cruces patrimoniales y detectar inconsistencias entre lo que una persona gana, gasta y posee, dado que no es posible modificar la Ley del Impuesto a las Ganancias por un Decreto de Necesidad y Urgencia (Art. 99 inc 3 CN).
El paquete también contemplaría un límite máximo -en torno a los USD 100.000 anuales- para las operaciones que podrán ser canalizadas sin que el fisco requiera información detallada. Es decir, quienes no superen ese umbral quedarían al margen del escrutinio habitual.
Aunque la Casa Rosada busca mostrar el plan como una política de simplificación administrativa, lo cierto es que hay tensión legal: la Constitución Nacional prohíbe modificar impuestos por decreto, lo que deja a estas medidas dentro de un gris normativo que dependerá de su implementación a través de resoluciones de ARCA y reglamentaciones secundarias.
Una señal al mercado y a los contribuyentes
El Gobierno apuesta a que esta flexibilización genere un mayor uso del dinero informal sin provocar una estampida de controles ni juicios fiscales. Es una forma de aflojar el torniquete tributario sin necesidad de pasar por el Congreso ni recurrir a medidas más impopulares.
Por ahora, los detalles definitivos se conocerán este jueves desde la Casa Rosada. Pero el mensaje ya está claro: Milei quiere que los dólares escondidos empiecen a circular, sin que sus dueños sientan que están cometiendo un delito. Y lo hará al borde del reglamento.
La medida ya había sido anticipada por el ministro Caputo días atrás en su discurso brindado durante el Latam Economic Forum.
En una frase que levantó vuelo y repercusión, el funcionario dijo que buscaba impulsar una remonetización en dólares: “Hay USD 200.000 millones en los colchones, entonces ¿por qué no usar esos dólares que ya la gente tiene?”. Según declaró, el Estado no va a emitir esos dólares, sino que buscará facilitar que esos fondos circulen en la economía formal, en competencia con el peso.
“Seguimos y vamos a seguir en un contexto macroeconómico sumamente ordenado”, concluyó. "Y eso le permitirá al sector privado ser los protagonistas de esta historia”, añadió.
“La economía está sana. Cuando baja la nominalidad, baja la tasa de interés, sube la demanda de dinero y eso permite que se recupere el crédito”, dijo Caputo.