Tras meses de rumores en la calle, Bodega Norton comunicó que “hoy” se presentó en Concurso Preventivo de Acreedores y la causa cayó en el Primer Juzgado de Procesos Concursales .
La presentación se realizó hoy y la empresa emitió un comunicado donde explica la situación. La deuda total a reestructurar es de 30 millones de dólares.
Tras meses de rumores en la calle, Bodega Norton comunicó que “hoy” se presentó en Concurso Preventivo de Acreedores y la causa cayó en el Primer Juzgado de Procesos Concursales .
Según expresó su CEO, Tomás Lange, en comunicado a la prensa la decisión “fue tomada para asegurar los puestos de trabajo y la continuidad de la operación”, en el marco de “un contexto desafiante para la industria vitivinícola tanto a nivel local como internacional” y “luego de evaluar distintas alternativas de solución a la situación financiera de la compañía”.
La empresa subrayó que “reafirma su compromiso con sus colaboradores y la comunidad vitivinícola” y que “continuará trabajando con el mismo espíritu de esfuerzo y excelencia que la caracteriza desde hace 130 años”.
Según registros de la Central de Deudores del Banco Central, Bodega Norton acumula hasta el momento 108 cheques rechazados, por un monto total que asciende a $ 1.442.042.073,33.
Además la deuda total con entidades financieras que deberá reestructurar es según datos del Banco Central de aproximadamente unos $ 44,3 mil millones de pesos, equivalente a unos US$ 30 millones al tipo de cambio oficial BNA ($ 1.475).
Si bien esta es la deuda registrada, lo cierto es que muchos proveedores de insumos, aseguraron a Los Andes, bajo reserva de nombre, que la empresa tendría otras deudas exigibles "en calle" que superarían ampliamente lo que muestra el Banco Central.
En la industria ya temen por un efecto cascada, ya que la situación no es buena para el sector en general. Es que el escenario para la vitivinicultura se muestra en un momento especialmente difícil. Con una economía en contracción, gastos crecientes y un consumo que no repunta, la situación es delicada y se siente la presión en cada tramo de la cadena productiva.
De acuerdo con las cifras más recientes del Instituto Nacional de Vitivinicultura(INV), entre enero y septiembre de 2025, la comercialización total de vinos en el mercado interno mostró una contracción del 2,5% frente al mismo período de 2024. El desempeño fue dispar según el tipo de producto: mientras el vino color registró una leve mejora del 0,6%, el vino blanco evidenció una caída significativa del 10,8%, consolidándose como el segmento de mayor retroceso en el consumo.
En el frente externo, las exportaciones de vino acumularon entre enero y septiembre de 2025 una caída del 6,3% en volumen respecto del mismo período del año anterior. El comportamiento fue dispar según tipo y formato. Dentro del vino total, los vinos color retrocedieron 7,7%, mientras que los blancos lograron un avance del 1,8%. En el segmento fraccionado, los envíos disminuyeron 5,2%, con una baja del 6,4% en tintos y una tenue mejora del 0,9% en blancos. El vino a granel profundizó la tendencia negativa con un descenso del 9,6%, explicado principalmente por la caída del 11,5% en vinos color, aunque los blancos a granel mostraron un crecimiento del 5,9%.