Javier Milei concedió una entrevista para destacar, entre otros muchos aspectos, que su gobierno es el único que en democracia no influyó sobre las decisiones judiciales con relación a los políticos y que por eso la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner se encuentra presa. Sin embargo, para la política mendocina lo que más impactó fueron los minutos que le dedicó, por propia iniciativa, a elogiar a su ministro Luis Petri.
Lo que expresó el presidente sobre el mendocino fue rotundo desde la mirada petrista, claro: “Es una superestrella, además de un ser humano formidable. Todos saben lo que hace en materia de defensa, pero la gente no sabe que es un gran ministro”. Quiso decir Milei que su funcionario abarca mucho más que el área en la que está a cargo. Agregó al respecto que en las discusiones de las reuniones de Gabinete en algunas oportunidades surgen temas “que requieren leyes o decretos y de repente, al otro día, aparece él (por Petri) con la solución. Es un súper ministro…”.
Queda claro que el presidente confía mucho en el mendocino. Con más razón cuando admite públicamente (varias veces lo ha hecho) que lo estrictamente político y lo que atañe a seguridad y defensa, por ejemplo, no son especialidades suyas. Y, de paso, de poco interés personal. Por lo tanto, es lógico que delegue esas funciones en personas de su mayor confianza. El mendocino parece haberla ganado con creces.
Este corto tramo de la charla que mantuvo el presidente en su despacho no sólo confirma el respaldo con que cuenta el funcionario mendocino, sino que, además, deja abierta la puerta hacia un destino al que Petri, nunca lo ocultó, pretendería arribar: la gobernación mendocina. Lo que no se sabe aún es si Milei está al tanto de ello o si consiente que su actual colaborador tenga ese destino.
Petri, vale recordarlo, ya probó suerte en aquella interna de las PASO de 2023, con las que, además, se relanzó a la escena nacional, en la que ya había tenido un rol protagónico como diputado nacional.
Mientras tanto, hasta este momento es poco probable que Petri decida competir como candidato a diputado nacional por Mendoza el 26 de octubre próximo. Su lugar en la consideración de los mendocinos parece consolidado y no necesitaría esa jugada. Pero sí es muy segura su influencia en el armado de la lista para el Congreso Nacional, con más razón luego de la tirantez que se generó por las conclusiones del congreso partidario para determinar cómo se elegirá a los candidatos tras la suspensión de las primarias. En esa reunión la mayoría cornejista alteró las expectativas de Petri y los suyos.
Cornejo, de todos modos, puede seguir argumentando que genera confianza en el gobierno de Milei. El actual ejemplo, haber sido designado por el Ejecutivo en el Consejo de Mayo en representación de los 18 gobernadores que firmaron el Pacto de Mayo.
Dicho Consejo, que es multisectorial, tiene como objetivo la llamada “legislación efectiva” de los diez puntos a los que los mandatarios provinciales prometieron fidelidad en Tucumán el 9 de julio último. Se pondrá en marcha recién el martes, con una reunión en Casa Rosada que presidirá Guillermo Francos, titular del nuevo cuerpo. El punto de discusión inicial sería la reforma laboral prevista por el gobierno libertario.
Y es a partir de esta designación que vuelve a crecer la sospecha de un acuerdo radical-libertario mucho más factible en Mendoza. Acuerdo que en gran medida pretende el Gobernador pero que puede también significar, por qué no, la segura presencia de Petri en el necesario armado de listas y estructuras.
Muchos consideran que Petri es hoy en día mucho más un valor que Milei pone en acción que un elegido por Cornejo pensando en una sucesión amigable. Son los mismos observadores de la escena política local los que sostienen que el futuro político del ministro nacional no tiene un techo todavía, mientras que Cornejo parece haberlo encontrado.
El común denominador en la política mendocina actual seguiría siendo Petri, que a simple vista parece hoy tener que empezar a decidir entre dos opciones muy tentadoras para la consolidación de su carrera política: seguir escalando y llegar a ser, tal vez en un segundo mandato de Milei, jefe de Gabinete o alguna jerarquía de esa envergadura, o bien dedicarse a la realidad de Mendoza y cumplir su indudable anhelo de competir por la Gobernación con muchas posibilidades, según las estadísticas que abundan por estos días.
A su vez, hay en La Libertad Avanza dirigentes que consideran que en esta provincia el oficialismo nacional puede ganar las elecciones sin tener que recurrir a Cornejo. Y menos aún depender de él. Se basan en algunas encuestas que señalarían que el mileísmo por sí solo está en condiciones de competirle a posibles listas cornejistas en caso de que no haya unidad. Aunque con el apoyo explícito de Petri esas chances aumentarían bastante.
Mientras tanto, el Gobernador, que necesita que sus listas hagan una buena elección local porque le quedará desde diciembre encarar la segunda mitad de su mandato, no pierde tiempo con el anuncio de proyectos que en muchos casos repercuten con fuerza.
A la interesante y necesaria ampliación de recorridos del Metrotranvía y al acuerdo para hacerse cargo de arreglos y ampliación de rutas nacionales de acceso a Mendoza, sumó ahora el proyecto para el Tren de Cercanías, que consiste en poner en funcionamiento la tradicional vía férrea nacional entre Gutiérrez y el importante núcleo urbano que conforman la ciudad de San Martín y La Colonia, Junín. Una propuesta ambiciosa que de algún modo inaugura la relación entre la Provincia y el mendocino Luis Pierrini, a cargo de la Secretaría de Transporte de la Nación, y que demuestra practicidad en la gestión por ambas partes: el gobierno mendocino y el de la Nación. Nada que permita suponer que la relación no es la más óptima.
La súper estrella y el Consejero de Mayo son ahora los protagonistas del nuevo capítulo preelectoral mendocino.
* El autor es periodista. [email protected]