5 de marzo de 2025 - 00:05

Depreciación del peso desde 1991

La caída del peso argentino durante décadas de gobiernos con políticas erradas y presidentes en muchos casos inoperantes.

Tomo 1991 como año base porque es el período, 1991/2024, que mayor vigencia ha tenido el peso. Antes tuvo cuatro cambios inflacionarios. Esto demuestra la enorme decadencia argentina originada en la mega ineptitud política y económica, 120 años, en varios casos delictivas. La ley 23.928 estableció la equivalencia 1 dolar = 1 peso (1 peso = 10.000 australes de Alfonsín) y 33 años después, 2024, 1 dólar = 1220 pesos.

Incredulidad, indignación, presidentes inoperantes, estafadora, ladrona, mentirosos. Partidos que solo sirvieron para el saqueo a la patria de San Martín. ¡En 33 años el peso se depreció 1220 veces¡

En esto el liderazgo kirchnerista fue notable, tanto que en 2024 Milei y su equipo han desarmado decenas de organismos corruptos con su caterva de directores y empleados responsables criminalmente. Catorce ceros se le agregaron al peso de 1945, lo que nos condenó a ocupar los últimos puestos más decadentes y vergonzantes de la escala mundial. Fuimos el ejemplo más paradigmático de lo que no debía hacerse y al que todos los Estados debían desechar.

Milei vino a sustituir, no a cambiar, esa imagen. La moneda más fuerte hoy de Sudamérica es el sol peruano y la de mayor apreciación en 2024 el peso argentino, en un 40%. Tanto así que en Argentina y Chile muchas agencias de cambio, antes abarrotadas de pesos argentinos se han quedado sin nuestra moneda.

Las previsiones de Milei fueron clausurar el BCRA y dolarizar la economía. Pero en 2024 se han producido cambios que nos han sorprendido a todos y también a Milei. Con superávit fiscal, comercial y financiero, todo agregado a la desaceleración sorprendente de la inflación durante 2024 y seguramente también en 2025, es posible que algunas previsiones cambien.

El 40% de apreciación del peso es nada en relación con su devaluación en 120 años. Pero de continuar el ascenso del poder adquisitivo de nuestra moneda podría significar la falta de necesidad de dolarizar, sin perjuicio de que exista bi o multi monetarismo. De suceder este fenómeno macro, nuestro peso podría liderar las monedas sudamericanas y convertirse en una de las más importantes, por lo menos en el mundo occidental. Algunos detractores en la oposición dirán que esta es una quimera inalcanzable. Pero si Argentina con las desregulaciones, baja de impuestos y aumento de las inversiones internas e internacionales en gas, petróleo, agroindustria, comercio, transporte general etc, se transforma en un país del primer mundo como aspira Milei y millones compartimos, la quimera puede ser una realidad tangible.

Aún queda mucho por hacer. Un cambio cultural es indispensable. Debe volver la meritocracia y desterrarse para siempre el acomodo y los privilegios políticos a favor de ineptos. La cultura del trabajo debe desplazar a la de la especulación y su remplazo por la cultura de la producción.

La sentencia de Ricardo Balbín debe ejecutarse. “El que gana gobierna y el que pierde ayuda”. La oposición a todo y la voluntad de destruir a quien ha sido elegido para gobernar deben quedar en el pasado para siempre. El poder no debe servir para que los políticos se enriquezcan sino para que el pueblo viva mejor.

Debe continuar la desinflación de tal modo que luego de medírsela mensualmente al dos por ciento lo sea en forma anual al dos por ciento. El crawling peg o devaluación administrada del 2% mensual ha descendido al 1% mensual y es muy bueno. Pero esta devaluación debe terminar cuando la apreciación definitiva de nuestra moneda sea una realidad.

Debe continuar la reducción del Estado y el crecimiento permanente de nuestra economía, con la eliminación de la pobreza y de la indigencia, valorizándose el salario y su poder adquisitivo.

Todo esto está calculado se realice en varios años. Pero con la velocidad que actúa Milei y su equipo creo posible que a fines de 2027 ya tengamos un país que comience a ser diferente y nos encausemos por la senda de los países desarrollados.

El 10 de diciembre de 2027 comenzará un nuevo período presidencial y millones de argentinos deseamos que sea con Milei en la Casa Rosada. Si así fuere continuarán las reformas necesarias a cargo de los ministros Sturzenegger, Caputo, Bullrich, Pettovello y Petri, en especial. Y debe prepararse al sucesor de Milei porque constitucionalmente no puede ejercer como Presidente más de ocho años. Es posible que de darse el éxito de la actual gestión algunos piensen en una reforma constitucional para la continuidad de Javier. Esto no debe ser porque él no lo quiere y porque la Democracia y la República exigen periodicidad en las funciones.

¡Además en ese entonces todos habremos logrado recuperar la querida Patria de nuestro máximo General!

LAS MAS LEIDAS