Limpieza de alimentos. Lavar la quinoa es clave para mejorar su sabor y aprovechar mejor sus nutrientes.
La quinoa es un alimento altamente nutritivo, pero su limpieza es fundamental para mejorar su sabor y digestibilidad. Este grano posee una capa natural de saponinas, compuestos que pueden aportar un gusto amargo si no se eliminan correctamente. Además, existen diferentes métodos para lavarla, incluso sin colador, utilizando utensilios de cocina comunes.
Aunque muchas marcas ofrecen quinoa prelavada, los expertos recomiendan un enjuague adicional con agua fría para asegurarse de que no queden restos de estas sustancias.
Además, existen diferentes métodos para lavarla, incluso sin colador, utilizando utensilios de cocina comunes.
La quinoa produce saponinas de manera natural para protegerse de insectos y aves. Estas sustancias forman una espuma jabonosa al contacto con el agua, lo que explica el sabor amargo si no se eliminan. Según estudios publicados en Science Direct, aunque la mayoría de la quinoa comercial pasa por un proceso de lavado industrial, siempre es recomendable realizar un enjuague adicional en casa para garantizar su limpieza total.
Método tradicional con colador
Si tenés un colador de malla fina, este es el método más rápido y efectivo:
Alternativas para lavar la quinoa sin colador
Si no tenés un colador de malla fina, probá con estos trucos caseros:
Aunque muchas marcas indican que su quinoa ya viene prelavada, algunos residuos de saponinas pueden permanecer. Los expertos sugieren enjuagarla rápidamente para eliminar cualquier rastro y evitar el sabor amargo.
Si querés mejorar la digestibilidad, podés dejar la quinoa en remojo durante una hora o incluso toda la noche. Esto ayuda a reducir los ácidos fíticos, que pueden dificultar la absorción de nutrientes. Luego, solo hay que enjuagar bien antes de cocinarla.