Un sudafricano que intentó subir al Everest sin autorización oficial tuvo que abandonar su intento a petición de las autoridades nepalesas y tendrá que pagar una multa de 22.000 dólares, anunció hoy una fuente del gobierno.
Ryan Sean Davy, de 43 años, logró según su propia versión llegar al Campo 2 (a 6.400 metros) antes de que descubrieran su intento.
Los extranjeros que quieren subir al Everest (8.848 metros) tienen que pagar un permiso que cuesta 11.000 dólares. La medida sirve a Nepal, uno de los países más pobres del mundo, para regular el número de visitas y para obtener ingresos.
El sudafricano no había pagado el permiso e intentaba subir en secreto, evitando las demás expediciones.
"Le vi cerca del campo base, me acerqué y huyó", explicó Gyanendra Shresth, un responsable del gobierno en el campo base del Everest.
"Le seguí con un amigo y lo encontré escondido en una cueva cercana (...) Había instalado su tienda de campaña en un lugar aislado para evitar las responsabilidades del gobierno", añadió.
Las autoridades confiscaron el pasaporte de Davy, que se expone a no poder entrar en el país durante cinco años o a una prohibición de practicar el alpinismo durante diez años.