Se duplicaron los casos de escarlatina en Mendoza

En Mendoza los cuadros de escarlatina se duplicaron este año respecto del anterior. Es un cuadro que para el común de la gente suena a una enfermedad de hace mucho tiempo, sin embargo muestra una tendencia al ascenso en tanto en 2022 ya había presentado un marcado incremento respecto del año previo.

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Así, se pasó de 185 notificaciones en 2021 a 766 en 2022 y otro gran salto a 1.517 durante 2023, según los registros de la Dirección de Epidemiología de Mendoza.

Lo que observan en general es que se presentan cuadros leves pero asimismo se remarca la importancia de realizar un tratamiento adecuado.

El incremento se da en el marco del aumento de la circulación del streptococcus pyogenes y es una de las enfermedades que la ocasiona.

El Ministerio de Salud de la Nación emitió una alerta en diciembre del año pasado por infecciones por este patógeno en varios países del mudo, la región y en Argentina y desde entonces las notificaciones han ido en aumento.

Andrea Falaschi, responsable del área explicó que estos cuadros llegan en general por los consultorios de atención ambulatoria y dijo que hay en particular un aumento de casos en las últimas semanas del 2023 con respecto a años anteriores. “Han sido casos leves sin requerir internación”, apuntó en relación a lo que se observa en toda la provincia.

“Es real, ha habido esta primavera e inicio de verano un aumento de casos de escarlatina y de faringitis por streptococcus; recordemos que la escarlatina es la expresión en piel de la infección de fauces de la angina causada por esa bacteria”, aseguró el pediatra Juan Gamboa, referente de la Unión de Pediatras de Mendoza.

En tanto, en el hospital pediátrico Humberto Notti aseguraron que por ahora los casos que reciben son los habituales para la época.

Los casos están concentrados entre los 2 y los 14 años. El segmento más afectado es el de los niños de entre los 5 y 9 años, le siguen quienes tienen entre 2 y 4 y luego entre los 10 y los 14 años.

También se presentaron casos en menores de 2 años los últimos tres años y casos aislados en personas de mayor edad.

“En general, los casos de escarlatina son leves. Nosotros hemos tenido un aumento de casos de escarlatina este año y del año pasado. Hay situaciones en donde la transmisión de la escarlatina es mayor, sobre todo en los lugares donde hay muchos niños que están en contacto estrecho, por ejemplo, en las escuelas. También puede contagiarse en los clubes, es decir, en donde hay niños que viven juntos. Donde hay un contacto estrecho entre los pacientes”, dijo Falaschi.

Contexto

La médica se refirió a que desde diciembre del año pasado, Reino Unido y Dinamarca anunciaron un aumento de casos de infecciones por este patógeno sobre todo en niños. Allí lo han asociado a una mutación genética de este germen. Tras una alerta al respeto de la OPS argentina se hace eco y comienza una notificación obligatoria.

“Lo que no se sabe es si esta nueva mutación de la bacteria o este serotipo o linaje nuevo se da más en las enfermedades invasivas o si este es un serotipo más transmisible entre las personas”, sumó.

Falashi detalló que la escarlatina es una enfermedad de la infancia, producida por este germen: el streptococcus pyogenes .

“Es una enfermedad que se llama endemoepidémica y tiene ciclos epidemiológicos. Estos ciclos pueden deberse a la interacción entre el agente y la susceptibilidad de la población”, detalló la especialista.

“Hay ciclos periódicos en donde hay un aumento de casos -continuó- y otros donde hay disminución. Se contagia el germen que se porta en la garganta a través del contacto directo o a través de las gotitas. Es decir, por ejemplo, las gotitas respiratorias o a través de la contaminación por gotitas de fomites. Por ejemplo, tomar del mismo vaso de una persona que tiene estreptococopiógenes en la garganta”.

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Cómo se presenta la escarlatina

“La edad de presentación en realidad siempre ha sido típicamente en la edad escolar, pero llamativamente este año también hemos visto niños más chicos con esta infección”, remarcó el pediatra.

La patología recibe además el nombre de fiebre escarlata porque da un exantema, es decir manchas en la piel de color rojo. Luego de un periodo de incubación aparece fiebre alta y unas manchas como pintitas rojas en la piel. Esta se pone áspera, “como un papel de lija”, ilustró Falaschi. Una de las características principales de la enfermedad es que la piel se pone rugosa.

Además puede aparecer dolor abdominal, garganta roja, lengua “aframbuesada” (enrojecida) o en doble B, con una parte blanca y otra enrojecida.

“Hemos visto variedad de presentaciones, muchos cuadros a lo mejor oligosintomáticos, o sea, con menos fiebre de lo habitual o con menos dolor de garganta del habitual y que se manifiestan con las lesiones en piel características”, refirió Gamboa.

“En general es una enfermedad leve, se caracteriza por fiebre alta que al segundo día de tomar el antibiótico correcto, que es la penicilina o la amoxicilina durante 10 días, se va”, dijo la funcionaria.

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“Es importante hacer el diagnóstico correcto y hacer un tratamiento completo, que son los 10 días, porque no cumplir adecuadamente los tratamientos es una causa de reincidencia sobre el paciente y facilita el contagio de los otros niños”, subrayó el pediatra. Es esencial para evitar reinfecciones, contagios y resistencias bacterianas cuando se utilizan mal los antibióticos.

Dijo además que si bien existe la posibilidad de que esta misma bacteria cause cuadros graves, son excepcionales y no se ha visto un aumento de casos de gravedad pese al incremento de cuadros en la comunidad.