El gobierno de Javier Milei decretó este lunes los cambios en el Servicio Militar Voluntario, que existe hace 30 años pero que volvió a la agenda pública tras el anuncio de la semana pasada realizado por el vocero presidencial Manuel Adorni.
Aunque existe hace tres décadas, el programa volvió a la agenda tras el anuncio del vocero Adorni con modificaciones para ingresar y permanecer en las Fuerzas, además de la capacitación.
Servicio Militar Voluntario
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Ejército Argentino El gobierno de Javier Milei decretó este lunes los cambios en el Servicio Militar Voluntario, que existe hace 30 años pero que volvió a la agenda pública tras el anuncio de la semana pasada realizado por el vocero presidencial Manuel Adorni.
La medida, publicada esta madrugada en el DNU N° 372/2025 del Boletín Oficial con firma del presidente Milei; el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro de Defensa, Luis Petri; introduce modificaciones en la reglamentación de la Ley N° 24.429 y alcanza a todos los ciudadanos que deseen incorporarse a las Fuerzas Armadas bajo la modalidad voluntaria.
“Los ciudadanos que ingresen al Servicio Militar Voluntario tendrán acceso a la capacitación, educación e instrucción para desempeñarse dentro del Sistema de Defensa Nacional y percibirán la retribución que fije el Poder Ejecutivo Nacional; al mismo tiempo que desarrollarán actividades tácticas, técnicas y logísticas, así como administrativas y aquellas necesarias para el mantenimiento y funcionamiento cotidiano de las unidades militares, según la especificidad de cada una de las Fuerzas Armadas”, dice el texto.
La principal novedad es la extensión del rango etario que puede inscribirse. Antes era de 18 a 24 años, ahora se prolonga hasta los 28.
Otro punto tiene que ver con el requisito de finalizar la educación secundaria para los soldados voluntarios que ingresen sin haber completado ese nivel. En ese sentido, el Ministerio de Defensa elaborará un plan de estudios que será remitido a la Secretaría de Educación del Ministerio de Capital Humano para su aprobación.
Además, se refuerza la capacitación en oficios y la certificación de competencias laborales con validez nacional, tanto para quienes continúen la carrera militar como para quienes se inserten en el mercado laboral civil tras su paso por las fuerzas.
Los aspirantes deberán aprobar un curso de admisión de entre 10 y 12 semanas, tras el cual serán dados de alta “en comisión” como Soldados Voluntarios de Segunda por un período máximo de dos años.
Sólo en casos excepcionales, cuando el soldado voluntario haya tenido un desempeño destacado y acredite avances comprobables en los estudios secundarios, una Junta de Calificaciones podrá recomendar hasta dos renovaciones de dos años cada una. Si después de seis años no se completó la instrucción escolar mínima obligatoria, el soldado será dado de baja y pasará a la reserva.
No podrán participar en el Servicio Militar Voluntario aquellos que tengan antecedentes penales o policiales o que antes hayan sido dado de baja por razones disciplinarias de otras fuerzas de seguridad federales.