Relatos salvajes: fue a reclamar por un medidor de luz, la empresa no le dio respuestas y destrozó la oficina

Si se escribe en el buscador de las redes sociales “Relatos Salvajes” los usuarios encontrarán videos de un incidente que ocurrió en la provincia de Misiones y que hace acordar a la película de Damián Szifron.

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Es que los videos publicados en plataformas como X (ex Twitter) revelan la escena que ocurrió en una oficina de la empresa Energía de Misiones, en la que un hombre perdió el control tras mantener una discusión con un empleado de la compañía y rompió todo tras sus pasos.

El hecho tuvo lugar este miércoles cerca de las 11 de la mañana, cuando un usuario del servicio eléctrico se presentó en la sede de la empresa para reclamar por las demoras en la instalación de un medidor, con el cual accedería a la luz. El sujeto estaba ofuscado porque –según se escucha en la filmación- llevaba cerca de dos años pidiendo por la colocación de ese medidor, pero Energía de Misiones no le daba una respuesta.

Tras un ida y vuelta entre usuario y empleado, el primero perdió la paciencia, se levantó de la silla y comenzó a romper todo lo que tenía al alcance de sus manos y de sus pies. Los box de atención al público fueron los que primero sufrieron la furia: destruyó vidrios, escritorios y papeles por igual.

Luego siguió con unos monitores y una computadora, previo a abandonar el lugar entre gritos, arrebatos y la mirada desconcertada de las personas que estaban en el lugar.

Según lo detalló Infobae, fuentes de la empresa señalaron que el agresor fue identificado y denunciado. Si bien se señaló que la furia del individuo fue por el aumento de la luz, desde Energía de Misiones informaron que “Este hombre compró un lote ubicado en el antiguo ingreso a la ciudad de Posadas, donde comenzó a construir una casa. Se tiene que mudar, pero a empresa constructora no le instala el medidor de luz. Él viene a reclamar a nuestras oficinas, pero nosotros no podemos hacer nada. Tienen que reclamarle a la constructora”.

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Y agregaron: “No es la primera vez que se presenta en la oficina. Aunque sí es la primera vez que reacciona de esta manera. Siempre que vino se le explicó lo mismo”.