Si pensás que hacer pan casero es complicado o que necesitás una amasadora, esta receta te va a sorprender. Con ingredientes simples, una licuadora y un poco de paciencia, podés preparar un pan integral suave y delicioso, ideal para sanguchitos caseros.
Esta preparación es perfecta para picadas, viandas o meriendas nutritivas para los más chicos de la casa.
Este pan combina lo mejor del sabor casero con la practicidad de una receta sin complicaciones. Además de ser una opción más saludable, ya que está hecho con harina integral, esta preparación es muy versátil: podés sumarle semillas, hierbas secas o especias para personalizarla a gusto. Y como el trabajo lo hace la licuadora, no necesitás tener experiencia en panadería.