“Elijo estar cerca de mi familia y amigos”: Julieta Navarro vuelve a Mendoza tras su paso por la televisión paraguaya

Primero Buenos Aires y después Paraguay. Julieta se define como una “ciudadana del mundo” y cree que es un “planazo” arriesgarse sin saber lo que viene después.

Julieta Navarro
Julieta Navarro

Pasaron muchos años desde que Julieta Navarro, junto a su marido Lucas Jerez, dejaron Mendoza para radicarse en Buenos Aires. Julieta empezó a trabajar en América junto a Antonio Laje y desde entonces no paró.

Después de Buenos Aires vino Paraguay. En el vecino país, Julieta siguió trabajando para América hasta septiembre del 2020. Pandemia mediante, los Navarro Jeréz volvieron a Buenos Aires, pero siempre con los pies inquietos. Con hambre de más.

Vuelta a Paraguay. En enero del 2021, Julieta llega a Gen, un canal relativamente nuevo que no tenía programación en vivo. ”Soy la coordinadora de producción artística de todo el canal y conduzco un programa los sábados pero esto último casi que por despuntar el vicio” cuenta Julieta sobre su presente laboral.

Pero no fue un camino fácil y “la Juli”, como la conocen todos, tuvo que trabajar un montón. Tenían casi todo “enlatado”. “En Pandemia se dio la oportunidad de que empezaran a trabajar en vivo y comienzan a salir como visual radio. Durante la pandemia crecieron bastante” cuenta Julieta sobre el canal que le abrió las puertas.

Ella comenzó como asesora y poco a poco se puso la diez para construir, junto a todo el equipo del canal, algo nuevo. Algo grande. La nota es a través de audios de whatsapp y cada audio, que promedian cada uno los cinco minutos, es adrenalina pura. Julieta cuenta todo con una pasión que es fácil imaginarse cómo vivió esta aventura de crecimiento personal y profesional.

“Llegué a un canal bastante rupturista y con gente muy copada que me dijeron onda ‘anda y hacé lo que quieras’ y yo dije ok. Y bueno, lo hice”. Las elecciones en Paraguay fueron clave para Julieta. Le dieron el puesto de project manager y tuvo que encargarse de todo: “tuve que hacer toda la puesta artística de todo, desde los colores de nuestro arte, nuestro set, armar toda la grilla y trabajar con las figuras también para que se soltaron un poco más”. La transmisión fue un éxito y eso la llevó a trabajar con el resto de la programación.

Creo que le puse todo. Dejé todo en la cancha y realmente fue así, un flash. Jamás me imaginé que me iba a pasar algo así, nunca pensé en ocupar un lugar así tan corporativo y a la vez tan de trinchera. Tuve la oportunidad de darle trabajo a gente de tomar decisiones importantes para un canal que puso plena confianz

a en mí”.

Pero la Julieta conductora también sigue ahí. Todos los sábados conduce un magazine de tres horas que lo tiene todo: cocina, debate y “quilombo”. “Es muy divertido” lo define ella misma y la referencia viene sola: “es como un Cada Día” (El programa de Canal 9 Televida que la supo tener como conductora junto a Coco Gras y Nico Bedorrou, los fundadores de un ciclo que está cerca de cumplir 12 años al aire).

Julieta Navarro junto al equipo de Cada Día
Julieta Navarro junto al equipo de Cada Día

Y la pregunta es casi obligada. ¿Por qué dejar todo ante un presente laboral tan bueno? “Es la pregunta. Creo que por primera vez en mi vida estoy eligiendo con el corazón. Necesito, por lo menos un tiempo, estar cerca de mi gente, de mis amigos, estar cerca de mi mamá. Cuando fui el año pasado la vi y hacía dos años que no la veía. De ahí para atrás la había visto un par de veces, pero bueno, mi laburo fue la prioridad. Ni cuando se murieron mis abuelos fui a Mendoza, entonces vengo trayendo algunas cosas que no les daba mucha bola y de pronto empezaron a hacer más ruido y bueno nada...digamos que en este momento de mi vida me ganas bastante esa otra parte” se sincera Julieta.

Julieta Navarro y el tiempo de volver a encontrarse

Pero nada está cerrado. “Sé que lo de acá está buenísimo y gracias a Dios también puedo tener la posibilidad de seguir trabajando con el canal de otras formas. Ellos acá tampoco me quieren soltar del todo y mis jefes, que son lo máximo, también me dijeron ‘anda, está con tu familia, con tu gente y volvé cuando quieras que tu lugar va a estar’ y un poco dije que si esta situación se me da así es porque sí. Cuando a mí me pasa por el corazón es como ‘ok, voy’. Yo soy así, no lo puedo manejar y bueno...y de pronto me voy a Mendoza.”

Es una montaña rusa de emociones. Nervios, ansiedad e insomnio. Pero Julieta ama el vértigo y eso es como combustible, no solo para ella, sino para su marido. Juntos se la juegan y esta es una aventura más. “No estoy durmiendo, me estoy despertando a las 3 de la mañana. Se te revuelve la panza, pero después pienso en que básicamente es lo que deseo, lo que me dice el corazón. Pienso en que voy a volver a estar cerca de mi familia, de mis amigas y me genera una alegría increíble. Quiero ver también con qué me sorprende la vida. No me sobra nada, absolutamente nada, pero por momentos es así mi vida. La amo así como está, así como está siendo. Trato de ser consciente de todo lo que lo que me ha pasado, de todo lo que he podido hacer y me divierte. Siento que he tenía una vida muy divertida y me parece un planazo no saber qué viene.

¿Qué van a hacer? No lo sabe y no lo quiere saber tampoco. Vienen con un objetivo claro y simple: estar con la familia. Recuperar tiempo, abrazos y juntadas con amigos. Seguramente Mendoza le dará la bienvenida con vino y risas. Una nueva aventura. Nuevas anécdotas.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA