Los abrigos de plumas, fundamentales durante el otoño y el invierno, destacan por ser cálidos, livianos y muy cómodos. Su relleno de plumón, que proporciona un excelente aislamiento térmico sin añadir peso, una combinación ideal para los días con temperaturas bajas. Su apropiada limpieza es esencial para mantener estas características.
Qué método de limpieza se debe tener en cuenta
Sin embargo, al momento de realizar la limpieza de estos, pueden surgir complicaciones: si no se secan correctamente, las plumas tienden a apelmazarse y pierden su forma característica. Para quienes buscan mantener sus prendas en perfecto estado, existe un método casero, económico y efectivo que permite devolverles su esponjosidad original de manera rápida y sin dañarlas.
Limpieza de camperas y abrigo de pluma
Este particular truco de limpieza puede bastante eficaz para las camperas.
El paso a paso
Este truco consiste en utilizar pelotas de tenis durante el secado. Así como suena: introducir dos o tres pelotas de tenis limpias en la secadora junto al abrigo ayuda a que las plumas no se apelmacen, ya que las pelotas golpean suavemente la prenda y favorecen la redistribución del relleno. El procedimiento es sencillo:
- Primero hay que lavar el abrigo con las indicaciones de su etiqueta, idealmente con detergente suave y sin suavizante.
- Luego, se lo coloca en la secadora con las pelotas de tenis y se selecciona un programa de baja temperatura y secado suave.
- Este mecanismo evita que el plumón se compacte, lo que conserva así el volumen y la textura del abrigo.
Las ventajas de realizar este tipo de trucos
El truco ha ganado popularidad precisamente por su eficacia y simpleza. Muchas personas lo aplican con buenos resultados, ya que logra que el abrigo recupere su volumen original y vuelva a sentirse esponjoso, como recién comprado. Para quienes no cuentan con secadora, existe una alternativa manual: secar el abrigo de forma horizontal al aire libre, agitándolo cada cierto tiempo y dándole suaves golpecitos con las manos para deshacer los grumos.
Aunque el proceso lleva más tiempo, también contribuye a mantener la distribución uniforme del relleno. Cuidar un abrigo de plumas no tiene por qué ser complicado si se sigue el método adecuado.