El "Momento de Inflexión" y la Nueva Doctrina
La paz no es sólo la terminación de una guerra, y no depende exclusivamente que se mantengan la relación de fuerza que condujo a su fin. Está estrechamente vinculada con la era que transita el mundo. Así el final de la segunda guerra mundial marcó el comienzo de la era atómica, donde la paz dependía del balance nuclear y dio comienzo a la guerra fría. Ahora la Estrategia de Seguridad Nacional 2025 (ESN25) de EE.UU. la da por finalizada Identificando un "momento de inflexión" que plantea la necesidad de una reorientación estratégica.
Veamos, el cambio de Biden a Trump, implica también un cambio “en el modo de ejercer la presidencia de singular interés. Esto se demuestra en forma concluyente considerando los documentos: ESN25 y ESN22. Existe una diferencia significativa y un cambio de enfoque sustancial entre ambas.
Del Indo-Pacífico a la Frontera: El Cambio de Prioridades
La conexión entre la seguridad nacional y la prosperidad económica interna comienza en la elección del enemigo. China cede el rol de amenaza principal a una Rusia, menos relevante. Este cambio se explica en una reconstrucción del contexto global. Se deja de priorizar las intervenciones militares o las grandes operaciones de "construcción de naciones" como lo fueron Afganistán o Irak. Limitando esas acciones a proteger los intereses vitales y directos de EE. UU. En términos de influencia militar, este documento busca “reajustar la presencia militar global” de EE. UU. “para enfocarse en amenazas más urgentes para el hemisferio”, lo que representa una reinterpretación de la bicentenaria “doctrina Monroe”, enfrentada por la propuesta “América para la Humanidad”, que le valiera el premio nobel de la Paz al canciller Argentino Carlos Saavedra Lamas.
Si bien China y Rusia continúan siendo actores importantes, la estrategia se vuelve más transaccional aplicando un concepto de “No-Intervencionismo Selectivo”. Y afirma el accionar de Trump en la devaluada alianza atlántica con una "Burden Shifting" (Transferencia de Carga), haciendo que aliados y socios (OTAN y Asia) asuman mayor responsabilidad financiera y militar en su propia defensa, y verifica qué puede aportar cada aliado directamente a la seguridad de EE. UU.
Militarización del Hemisferio: El Narcoterrorismo como Casus Belli
Se minimiza la importancia de Medio Oriente Medio y se propone reconsiderar su presencia militar en el hemisferio occidental y global para abordar las amenazas urgentes en las Américas. Para ello plantea fortalecer el papel de la Guardia Costera y de la Armada a fin de controlar rutas marítimas, detener la migración ilegal y el tráfico de drogas, y concretar despliegues específicos destinados a “asegurar la frontera” y “derrotar a los cárteles”, incluso mediante el uso de la fuerza. Demás está señalar que así legitima para EEUU. Podría interpretarse que este enfoque legitima el despliegue naval frente a Venezuela. Al establecer como enemigo al Narcoterrorismo en la región. La lucha contra los cárteles transnacionales y el narcotráfico, especialmente de fentanilo, es elevada a máxima prioridad de seguridad nacional, autorizando la acción directa y el uso de operaciones de inteligencia para desmantelar estas organizaciones en el hemisferio occidental.
La Guerra por los Recursos Críticos y la Supremacía Tecnológica
La nueva estrategia también señala la necesidad de establecer o ampliar el acceso militar en lugares estratégicamente importantes del continente. Podría entenderse que los recursos clave también incluyen litio y cobre y tierras raras, o minerales esenciales para la infraestructura energética y los centros de datos y para bajar el costo de operación de centros de cómputo y producción de IA cuyo acceso EE. UU. busca garantizar con el "desarrollo conjunto" de socios regionales. Dado que pretende retener una superioridad tecnológica respecto a China en campos críticos (IA, computación cuántica, biotecnología).
La nueva ESN25 destaca que el hemisferio occidental alberga numerosos recursos estratégicos a los que Estados Unidos debe garantizar acceso en coordinación con aliados. En ese sentido, el Consejo de Seguridad Nacional iniciará un proceso inmediato para que diversas agencias —incluida la Comunidad de Inteligencia— identifiquen puntos y recursos estratégicos en todo el hemisferio, con miras a su protección y al “desarrollo conjunto” con los socios regionales. Impulsa la autosuficiencia energética mediante el fomento de la producción nacional de combustibles fósiles y nucleares, uso de la energía nuclear como herramienta de poder geopolítico.
Visión de Futuro vs. Justificación Política: La Variable del Tiempo
No puedo dejar de señalar la presentación que el presidente hace del documento: “Durante los últimos nueve meses, hemos salvado a nuestra nación y al mundo entero, que se encontraban al borde del abismo y de la catástrofe… Tras cuatro años de debilidad, extremismo y desastrosos fracasos, mi administración ha actuado con urgencia y una rapidez histórica para restaurar el poder estadounidense en el ámbito nacional e internacional, y devolver la paz y la estabilidad a nuestro mundo” reflejando con prístina claridad que su elaboración responde más a la justificación de una política ya adoptada desde el comienzo de su administración que a una previsión de futuros como lo fuera el documento Global Trends 2040, que se aplicó durante la presidencia de Biden. Este último, como lo señala con detalle nuestro recordado Ted Gordon, resulta de “la información que) provino de artículos encargados, talleres, entrevistas y comentarios, en gran parte cualitativo. Se utilizaron varios modelos cuantitativos para apoyar con números las ideas que sugirieron de los consultores. Sintetizando esta información en intendencias, luego considera cambios de juego que podrían desviar esas tendencias, para diseñar mundos potenciales (los escenarios), y finalmente probados con 'cambios tectónicos' y 'desarrollos del cisne negro'".
Volviendo al documento ESN25 Se prioriza la inversión masiva y la protección de la base industrial y tecnológica doméstica, incluyendo la aceleración de la producción de semiconductores. También impulsa una alianza más estrecha entre el gobierno estadounidense y el sector privado. Las embajadas deberán estar al tanto de las principales oportunidades de negocio en cada país, en especial de los grandes contratos gubernamentales.
Con ello se pretende una “dominación sin hegemonía” con asistencia condicionada. La ayuda económica y la cooperación con los países del hemisferio se condicionarán estrictamente a su cooperación en temas de control migratorio y lucha contra el narcotráfico. Asimismo, promueve una creciente militarización continental, cómo instrumento clave ante la falta de asistencia tradicional.
Las tres preguntas a la que la ESN25 pretende dar respuesta son: ¿Qué debe querer EE.UU.? ¿De qué medios disponemos para lograrlo? y ¿Cómo podemos relacionar los fines y los medios en una estrategia de seguridad nacional viable? Pero falta una esencial: ¿En cuando tiempo debemos alcanzar los objetivos propuestos? Porque está elaborada sobre una percepción del tiempo conforme el pensamiento convencional de los EE.UU. China piensa y obra de otra manera.
El CEO de Nvidia, Jensen Huang, ha hecho una comparativa muy sencilla de efectividad, en un momento donde la construcción de infraestructuras críticas y la rapidez en las respuestas se antoja necesaria. Dijo que China tiene una ventaja en infraestructura de Inteligencia Artificial (IA) sobre Estados Unidos, específicamente en construcción y energía: “Si se quiere construir un centro de datos aquí en Estados Unidos, desde la construcción inicial hasta la puesta en marcha de una supercomputadora de IA se necesitan probablemente unos tres años. Pueden construir un hospital en un fin de semana”, dijo Huang, en referencia a la efectividad asiática en cuanto a tiempos.
Para seguir siendo una potencia indisputada EE. UU. debe antes verificar el estado actual, tendencial y planificado de las tecnologías críticas de China con gran precisión, porque de ello depende su futuro y de alguna manera también el de un mundo globalizado.
La Paz es un resultado de la guerra, y ésta, como dijo László Krasznahorkai, Premio Nobel de Literatura 2024: "Guerra en la naturaleza, guerra en la sociedad, pero la guerra no se libra sólo con armas, con tortura, o con destrucción; este es sólo un extremo de la escala, pero la guerra también procede del extremo opuesto de la escala, porque una sola mala palabra es suficiente".
* El autor es licenciado en Ciencias Políticas y Sociales, graduado en: Defensa Nacional, y en Planeamiento de la Defensa, Doctor en Historia e Investigador de Futuros Globales. Dirige el Centro Latinoamericano de Globalización y Prospectiva, nodo del Millennium Project.