Una empresa nacional planea triplicar su producción ganadera en Mendoza

Marolio proyecta pasar de criar 1.000 a 3.000 animales, además de aumentar un feedlot propio de 4.000 a 6.000 cabezas. Hoy su finca en Mendoza cuenta con 1.500 ha cultivadas.

Cerca del 90 % de los animales que consume Mendoza se engorda en otras provincias. Foto: Ignacio Blanco / Los Andes
Cerca del 90 % de los animales que consume Mendoza se engorda en otras provincias. Foto: Ignacio Blanco / Los Andes

El sector ganadero en Mendoza es uno de los que más expectativas tiene en la producción local, y una nueva inversión de Marolio parece confirmar ese momento. Es que Víctor Fera, dueño de esa marca, de Molto y Maxiconsumo, se propone ampliar sus hectáreas productivos en Lavalle y pasar de criar 1.000 a 3.000 vacunos, con la idea de completar el engorde en estas tierras.

“Nosotros somos grandes productores de tomate en la provincia y en un momento comenzamos con la ganadería, que está creciendo mucho y hoy es un negocio importante. Hoy vendemos la carne en distintos lugares, ya sea como novillo o vaquillona en pie”, describió Fera a Los Andes.

La empresa industrializaba tomates en Mendoza a través de la marca Molto y de ahí se dedicaron a la producción primaria en dos fincas de Costa de Araujo, Lavalle. Son unas 4.000 ha de espacio, de las cuales hoy tienen producción en 1.500 ha, no solo de tomates sino también de verdeos y cereales. En 2019 compraron hacienda para engorde y hoy tienen un feedlot con unos 4.000 animales, además de criar Angus.

Como se ha indicado en otras notas sobre ganadería, Mendoza es fuerte en la cría de animales, pero luego el engorde se hace en otras provincias y después se termina trayendo cerca del 90 % de la carne que se consume. En números de la dirección provincial de Ganadería, en 2021 los ganaderos mendocinos engordaron 51.135 vacunos, pero la población consumió mucho más: 441.171.

El titular de Marolio conoce esta situación y cree que se puede trabajar para que el Este mendocino engorde más. Si bien la ampliación está pensada para dentro de un año y medio (hasta dos años), ahora mismo producen carne en feedlot y genética para mejorar la raza en la provincia. Además de triplicar la cría, quieren que su feelot pase de 4.000 a 6.000 cabezas.

“Es conocido que hoy Mendoza produce terneros, que luego se llevan a engordar a otras provincias. Nuestra idea es trabajar con CamEste (cámara de productores ganaderos del Este) para que se pueda engordar sin tener que trasladar. Llevará mucho tiempo, pero tenemos los campos para hacerlo y uno inicia el camino”, afirmó Fera. Pensando en las góndolas, una posible idea es que las Angus coloradas serían marca Molto y las Angus negras se venderían con marca Marolio.

En cuanto a la mano de obra que podría implicar esta inversión, hoy cuentan con 200 empleados efectivos en la planta para industrializar tomate y mil empleados temporarios. “Se podría crecer un 50 % más en empleos temporarios y 100 % en efectivos. Repito, pensando de aquí a dos años”, agregó el empresario.

Del almacén a la finca

Un detalle curioso es que la empresa inversora primero nació como un almacén en Buenos Aires, luego adquirió la marca Marolio y después creó el mayorista Maxiconsumo. Al ir creciendo, la familia Fera incursionó en la elaboración de alimentos, de manera que hoy tienen fábricas de tomate, arvejas, fideos, vinagre y arroz.

En Mendoza, trabajan con la Asociación Tomate 2.000 (que reúne a productores e industriales) y de sus 1.500 ha productivas hoy tienen 500 ha de tomate y 1.000 divididas entre maíz, avena, cebada y alfalfa. Para alimentar al ganado necesitaban hacer el picado en tiempo y forma, pero las distancias a la finca y las dificultades para encontrar contratistas los impulsó a comprar su primera picadora de forrajes, una maquinaria Jaguar 940 de la empresa Grupo Claas.

Una vez que la Jaguar estuvo lista en el campo, Fera propuso brindar servicios a campos vecinos de hasta 70 kilómetros a la redonda, que comenzaron a abastecer al feedlot con las partidas de maíz y otros cultivos usados en la rotación de sus fincas de tomate. Pusieron mucho énfasis en capacitar a su equipo de tractoristas para llevar adelante esta tarea.

En cuanto a inversiones agrícolas, la idea es para 2023 tener otras 500 ha de tomate para industria. Además, el titular de Marolio comentó que trabajan en durazno y hoy tienen 70 ha con riego subarbóreo contra heladas y protección contra granizo, con la idea de llegar a 200 ha de durazno en dos años.

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