Durante este invierno 2025, la moda femenina redefine su estilo con tendencias que priorizan lo visualmente impactante. En materia de accesorios, las propuestas minimalistas dan lugar a piezas audaces. Las pulseras finitas pierden protagonismo frente a tres ítems que marcan un giro en los hábitos de uso y estilo: aros extragrandes, collares de cadena y guantes largos.
Los collares cadena
En contraste con los colgantes delicados de temporadas anteriores, los collares gruesos y de eslabones grandes toman la delantera.
El diseño tipo cadena —simple, doble o incluso triple— se destaca por sumar textura y peso visual. Algunos modelos integran dijes metálicos o detalles esmaltados.
Se usan por fuera del cuello de sweaters, poleras o camisas cerradas, generando un efecto de contraste.
Esta tendencia apunta a dar volumen al tercio superior del cuerpo, y permite jugar con combinaciones monocromáticas o superposiciones.
Los aros XL como tendencia
Después de varias temporadas relegados, los aros de gran tamaño regresan con fuerza.
Se imponen en formatos redondos, rectangulares y geométricos, y se fabrican en materiales metálicos, con piedras o colores vibrantes como azul, rojo y verde esmeralda. El dorado continúa siendo el tono preferido, pero se suman nuevas paletas.
Este tipo de accesorio genera impacto visual y se combina con peinados recogidos o melenas sueltas con raya al medio, aportando equilibrio entre el rostro y el complemento.
No sólo acompañan outfits nocturnos: los aros XL ganan espacio en la moda urbana, con looks más relajados y monocromáticos.
¿Qué dicen los guantes largos sobre la nueva elegancia?
Este invierno, los guantes largos no solo se eligen por abrigo: también funcionan como un detalle de estilo con carga estética. En cuero, gamuza, tejidos o eco cuero, cubren hasta el antebrazo e incluso más allá del codo.
Los diseños se presentan en tonos neutros como negro y marrón, aunque también hay propuestas en colores intensos, estampados o con bordados.
Los guantes se convierten en la pieza ideal para complementar sacos rectos, tapados lisos o capas, aportando elegancia con una impronta retro actualizada.
¿Cuál es la lógica detrás del cambio en los accesorios?
Este giro hacia lo voluminoso, expresivo y texturado responde a una necesidad de reafirmar la identidad personal a través de la vestimenta.
En un contexto de climas extremos y rutinas más intensas, las mujeres eligen piezas que, además de funcionales, comuniquen presencia, seguridad y estilo.