La hija de Jorge Rial quedó en libertad y se sinceró sobre el rol que cumplen su padre y de su hermana, Rocío Rial, en su vida.
Morena Rial fue tajante al referirse a Jorge Rial.
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Morena Rial rompió el silencio tras recuperar su libertad y habló con Puro Show (Eltrece) sobre los diez días que pasó detenida. En diálogo con el periodista Alejandro Castello, la hija de Jorge Rial dio detalles sobre cómo se encuentra hoy, con su bebé de tres meses nuevamente a su lado y la relación con su familia.
Cuando el notero le preguntó cómo fue estar detenida, Morena respondió con sinceridad: "Lo único que te puedo decir es que fue triste y la pasé mal esos diez días encerrada". Sin embargo, aseguró que en ningún momento sintió miedo, aunque sí la preocupaba la situación de su hijo Amadeo, quien durante su ausencia quedó al cuidado de su abuelo y su tía, Rocío Rial.
Más allá del alivio de haber recuperado su libertad, Morena Rial se mostró molesta por los comentarios que surgieron en los medios y en redes sociales mientras estuvo detenida. "Hablan de más y por eso estoy como a la defensiva", expresó con firmeza.
Además, desmintió algunas versiones sobre su vida personal: "Me trataron de drogadicta, de alcohólica, que tengo adicciones y nada que ver. No me drogo y tomo alcohol social, cuando salgo, y me juzgan como madre, pero nadie puede hablar de mi rol como madre".
Con estas declaraciones, la joven dejó en claro que su prioridad es su hijo y que, a pesar de las acusaciones y el escándalo mediático, sigue enfocada en su rol de madre.
Uno de los aspectos que más llamó la atención fue su reconciliación con su familia. Morena había estado distanciada de su padre, Jorge Rial, y de su hermana Rocío, pero tras su detención el vínculo se reestableció. "Con mi hermana está todo bien y con mi papá también", afirmó.
El periodista le hizo notar que Jorge siempre estuvo presente, a pesar de las diferencias. "Hay como un reencuentro ahí y tu papá hace lo que puede como papá...", comentó Castello. Morena, sin titubeos, reconoció: "Y sí, qué va a hacer mi papá si la que se manda las cagadas soy yo".
De esta manera, admitió su responsabilidad en lo sucedido y valoró el apoyo que recibió de su padre, quien, más allá de las diferencias y los conflictos, la acompañó en el proceso.