El conductor fue acusado de haber desviado fondos de una colecta solidaria. Moranzoni decidió responder y aclarar su situación.
Diego Moranzoni fue despedido de Crónica TV tras ser vinculado con una presunta estafa relacionada con una colecta solidaria. El escándalo y acusación inicial surgió de Griselda Franco, una mujer diagnosticada con esclerosis lateral amiotrófica (ELA), quien denunció que el periodista habría desviado parte de los fondos recaudados en su programa para costear un tratamiento médico.
Según su testimonio, Moranzoni utilizó su propio celular para transferir parte del dinero a una cuenta a su nombre, tras retirarse al camarín durante la transmisión. La suma devuelta posteriormente habría sido inferior a lo recaudado. El hecho, que se originó en el marco de una campaña solidaria televisiva, escaló rápidamente cuando figuras como Yanina Latorre y Fede Flowers aportaron detalles sobre supuestas irregularidades sistemáticas y movimientos financieros llamativos en el entorno del conductor.
El conflicto tomó relevancia cuando Yanina Latorre reveló en LAM que no se trataba de un caso aislado. Afirmó que las autoridades del canal ya observaban ciertos movimientos inusuales de Moranzoni y su equipo, y que varios productores vinculados al conductor habrían hecho viajes reiterados al Caribe en lapsos breves, a pesar de sus bajos ingresos formales.
También se señaló que el dinero de las colectas solidarias era gestionado a través de cuentas personales de su equipo y que algunas recaudaciones habían superado los 10 millones de pesos. Juli Argenta, por su parte, sumó que la salida del periodista fue escandalosa: abandonó el canal a los gritos y no se despidió de nadie. Latorre agregó que tanto Moranzoni como su socio Augusto Pomar, quien también pasó de C5N a Crónica, mantenían un nivel de vida “inexplicable” para su rol y responsabilidades.
El conductor negó rotundamente haber cometido una estafa. En diálogo con Puro Show (eltrece), sostuvo que se trató de un malentendido con una amiga a quien le pidió prestado dinero y luego se lo devolvió. “Esto lo voy a probar en tres segundos, ni siquiera lo hice yo”, aseguró. Además, denunció que detrás de las acusaciones podría haber motivaciones políticas y mediáticas.
“Sí, hay una operación. No me quedé con ningún peso de nadie. Jamás lo haría. No sé por qué me están haciendo esto… En realidad sí lo sé, son las reglas del juego”, expresó. Afirmó que no iniciaría acciones legales, pero sí explicaría públicamente los hechos. Sobre la reacción de Crónica, dijo: “Me sorprendió la actitud del canal, pero me chupa un hue***. Ellos seguirán con lo que tienen que hacer y yo seguiré con mi vida”.
Crónica TV prescindió del conductor sin ofrecer explicaciones detalladas al aire. Fuentes internas del canal aseguraron que existían documentos sobre los movimientos de dinero, y aunque oficialmente se mencionó que el contrato de Moranzoni vencía en junio, todo indica que la denuncia precipitó su salida.
Pablo Montagna aportó que no se renovó el contrato porque el canal “no puede más de lo que puede”, y que Moranzoni tendría otras ofertas que Crónica no podía igualar. Sin embargo, este encuadre contractual contrasta con la versión de una desvinculación forzada tras el escándalo.
Frente a la tensión instalada, Griselda Franco sostuvo sus declaraciones y afirmó que no formalizó la denuncia porque aún no logra procesar lo ocurrido. Aseguró que solo recibió una caja del medicamento prometido. La situación dejó un clima de incertidumbre en el canal, donde Moranzoni ocupaba un espacio clave. Por ahora, no se confirmó quién lo reemplazará ni cómo se reorganizará la grilla.