Condenada VIP

La detenida Cristina Fernández de Kirchner, extiende los límites de la libertad de expresión a su gusto y beneficio. La ley deber ser aplicada del mismo modo para cualquier otro ciudadano en iguales circunstancias. ¡No hay privilegios para nadie!

"El gobierno de Milei tiene vencimiento..." "Tu equilibrio es una bomba de tiempo y ya se escucha el tic-tac..."; son algunos de los irritantes comentarios proferidos desde su prisión domiciliaria en el barrio porteño por la expresidenta Cristina F. de Kirchner, condenada a seis años de prisión por administración fraudulenta. Se le otorgó este beneficio por tener más de 70 años, bajo ciertas condiciones y restricciones específicas. Lo cierto que el lugar asignado de confinamiento no es el más adecuado: por su propia seguridad, por el vecindario circundante, por sus ruidosos y obsecuentes seguidores, por el tránsito e higiene del lugar. Lejos de asumir la detención con la reserva propia de quien debe cumplir una pena, se muestra exultante y desafiante en sus salidas al balcón.

El contenido político de sus mensajes rebasa toda discrecionalidad que debe observar por su condición de rea, mostrándose como "víctima de un proceso de proscripción", lanzando proclamas como "Vamos a volver", menospreciando vilmente la persona, la gestión y la investidura presidencial. El objetivo es socavar el plan económico y de ser posible lograr el derrocamiento de Milei. Su departamento se ha convertido en un centro de operaciones...una tribuna política...desde donde parten todo tipo de confabulaciones. La detenida extiende los límites de la libertad de expresión a su gusto y beneficio. La ley deber ser aplicada del mismo modo para cualquier otro ciudadano en iguales circunstancias. ¡No hay privilegios para nadie! El Tribunal Oral Federal N° 2 debe adoptar una decisión firme poniendo coto a esta situación irregular, trasladando a la condenada a un sitio alejado y reservado.

Sergio Miguel Rovira. DNI: 7.617.096.

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