En el segundo día de la audiencia pública por PSJ Cobre Mendocino en Uspallata, el CEO de la compañía – Fabián Gregorio- anticipó cómo continuará el proceso. En primer lugar, destacó que todavía quedan casi dos semanas para finalizar la audiencia ya que se prevén seis días de exposiciones presenciales y una cantidad similar de virtuales. Debido a que muchos se inscribieron y no acudieron, es probable que esta etapa finalice antes.
En este marco, Gregorio destacó el orden con que se ha realizado hasta el momento la audiencia pública y apostó por que continúe en el mismo tono. Agregó que una vez finalizada, la autoridad ambiental minera debe incorporar los aportes o dudas surgidos en este momento. “Cuando la autoridad nos haga los requerimientos específicos, los responderemos lo antes posible”, destacó Gregorio con relación a los pasos a seguir.
Una vez que todo quede incorporado al dictamen que ya posee más de 6.000 páginas, la empresa estará en condiciones de recibir su dictamen final para presentar su Declaración de Impacto Ambiental (DIA). “El proceso evaluatorio está cumpliendo sus plazos y una vez concluida la etapa administrativa tiene que ser ratificado por la Legislatura”, recordó Gregorio y agregó que se trata de tiempos políticos que están fuera del alcance de PSJ.
Qué pasará con los puestos de trabajo
Más allá de esto, si el proyecto logra la ratificación legislativa, todavía habrá que esperar a que la construcción sea una realidad debido a los tiempos lógicos de esta actividad. Sin embargo, desde la empresa se comprometieron a trabajar rápidamente en la factibilización del proyecto luego de contar con los avales requeridos por ley. “Estamos por cerrar el financiamiento y estamos muy avanzados en ese sentido”, precisó Gregorio.
El ejecutivo anticipó que un año después de que esté la DIA ratificada estarán en condiciones de construir la mina, etapa que tendrá una duración de entre 18 y 24 meses. Aquí se contratarán a unas 3.900 personas de manera directa e indirecta. En la etapa de extracción, PSJ contratará a 600 trabajadores de manera directa y a 1.800 de forma indirecta.
Sobre este punto, Gregorio aclaró que aquí entrarán todas las empresas de servicios que se precisan para que la mina funcione, lo que se traduce en una inversión de 120 millones de dólares anuales. Con relación esto, la empresa hace una fuerte apuesta por el ecosistema empresario de Mendoza que es “mucho más interesante” que el que poseen otras provincias en donde hay desarrollo de minería.
Por otra parte, en función de la confianza manifestada por los uspallatinos que apoyaron a PSJ durante la audiencia, el CEO de la compañía señaló que buscarán priorizar a quienes viven en Uspallata. Por ello desde hace tiempo realizan distintos programas de capacitación a personas así como de fortalecimiento a las empresas proveedoras de la provincia en general.