Las arañas son uno de los grupos más importantes en términos de abundancia, diversidad, biomasa, historia evolutiva y roles funcionales dentro de los ecosistemas. Con más de 52.000 especies descriptas en todo el mundo, se encuentran entre los animales más diversos en hábitats terrestres.
A su vez, presentan una amplia gama de estrategias de caza y habitan una gran variedad de ambientes. En general sobre las arañas existe una percepción negativa, con frecuencia asociada a la aracnofobia y el miedo que causa el veneno que poseen (a pesar de que la gran mayoría de las especies son inofensivas). Sin embargo, las arañas son uno de los protagonistas desconocidos de nuestros ecosistemas, ya que proporcionan una gran variedad de servicios ecosistémicos contribuyendo al bienestar de la humanidad y del ambiente. A nivel general, los servicios ecosistémicos se pueden clasificar en cuatro tipos principales: aprovisionamiento (como medicamentos y materiales), regulación (como control biológico), soporte (como el ciclo de nutrientes) y cultural (beneficios recreativos y espirituales). Estos servicios son cruciales para nuestro bienestar, destacando la importancia de preservar y gestionar de manera sostenible nuestros entornos naturales.
El papel de las arañas en los viñedos
Araña saltarina (Phiale roburifoliata-Salticidae) alimentandose de Liorhyssus hyalinus (Hemiptera) en un interfilar
Ángeles Romero
Las arañas proveen servicios muy importantes en los cultivos, los cuales se describen brevemente a continuación:
-Supresión de plagas: La mayoría de las especies de arañas son generalistas, es decir que consumen diferentes tipos de presas alimentándose principalmente de insectos (polillas, escarabajos, moscas, grillos, entre muchos otras). Actualmente existen evidencias que demuestran que las arañas tienen la capacidad de suprimir las poblaciones de plagas, aunque por un corto período de tiempo y en condiciones específicas. No obstante, son una parte esencial del control biológico por conservación, que se basa en sostener su abundancia natural a través del manejo de los cultivos como parte de la preservación de la comunidad de enemigos naturales. En conjunto con otras alternativas de control, el papel que cumplen beneficia a los cultivos, generando una disminución en las densidades de herbívoros y del daño que éstos causan a las plantas. Un reciente estudio en Europa demostró que su eficacia para suprimir plagas es mayor en cultivos como arrozales y viñedos en comparación con trigo y otros cereales. Una explicación es que las plantas de arroz y vid son estructuralmente más heterogéneas y complejas que las de trigo, además de que los viñedos, al ser perennes, permiten preservar una comunidad más diversa y equilibrada en el tiempo, en comparación con cultivos anuales.
Actualmente existen evidencias que demuestran que las arañas tienen la capacidad de suprimir las poblaciones de plagas, aunque por un corto período de tiempo y en condiciones específicas. No obstante, son una parte esencial del control biológico por conservación.
-Ciclo de nutrientes: las arañas afectan el ciclo de nutrientes de manera directa e indirecta. De forma directa se incluyen la excreción, defecación y eliminación de restos de presas. Es más importante como influyen indirectamente en el ciclo de nutrientes al desencadenar cascadas tróficas en las cadenas alimenticias basadas en detritos. Se ha demostrado que las arañas pueden ralentizar y acelerar significativamente la descomposición de la hojarasca en suelos forestales. A su vez, pueden influir en el ciclo de nutrientes al desencadenar cascadas tróficas en la cadena alimentaria basada en plantas, porque influyen en la calidad y cantidad de materia orgánica que ingresa a los procesos de descomposición y mineralización. Estos impactos los generan consumiendo gran cantidad de organismos descomponedores y herbívoros.
-Comida de otros organismos: Las arañas son consumidas por una gran diversidad de depredadores, incluyendo aves, mamíferos, anfibios, reptiles, peces y otros artrópodos, lo que contribuye a la estructura trófica de los ecosistemas. Las aves se encuentran entre sus principales depredadores en los viñedos.
-Indicadores: Las arañas son muy útiles como indicadores de diversidad o de la salud ambiental. Cambios en las poblaciones de arañas y en la composición de las especies se utilizan para exponer y predecir variaciones en la extensión y la calidad del hábitat, los niveles de contaminación y otros factores ambientales. Su gran abundancia, diversidad y facilidad de recolección hacen de este grupo de animales uno de los más utilizados para analizar efectos de manejos en diferentes cultivos, mejorando la toma de decisiones sobre los manejos en pos de una agricultura sostenible. Las arañas también son indicadores de contaminantes químicos en los ecosistemas acuáticos y contaminación por metales pesados.
El papel de las arañas en los viñedos
Tela de Araneidae en viñedo
Gabriel Pompozzi
Actualmente se han registrado más de 170 especies en la provincia, pero probablemente el número de especies sea mucho mayor ya que en cada nueva investigación surgen especies que no estaban reportadas. En los últimos años, nuestra área de investigación del Laboratorio de Entomología del Iadiza, junto con docentes y estudiantes de la Facultad de Agronomía de la UNCuyo, ha estado incrementando notablemente las investigaciones en este grupo, particularmente en viñedos. Dentro de estas investigaciones, hemos colocado estructuras en las plantas de vid para incrementar los refugios de las arañas y analizado la comunidad de arañas de suelo y follaje a lo largo de un gradiente de parche de vegetación espontánea hacia el interior de un viñedo.
Actualmente tenemos en marcha estudios sobre parches y corredores de vegetación nativa inmersos en viñedos para conocer si se incrementa la densidad y diversidad de arañas, estudiamos la dieta y dinámica poblacional de una especie de araña que se alimenta de hormigas y evaluamos el impacto de interfilares clausurados al manejo. Todavía falta mucho camino para poder conocer bien cuál es la comunidad de arañas que habita en los viñedos y cuáles son sus presas más frecuentes para corroborar el rol dentro del control de plagas. Por ejemplo, las arañas pueden alimentarse de la polilla de la vid, de chicharritas e incluso hay especies mirmecófagas que se alimentan exclusivamente de hormigas cortadoras. A su vez, es necesario mejorar el conocimiento sobre el impacto que los diferentes manejos que se realizan en los viñedos pueden tener sobre las arañas. Prácticas de cultivos que favorezcan la presencia de las arañas permitirá disminuir el uso de pesticidas y reducirá el daño que las plagas causan en las plantas de vid, generando ambientes más sustentables y diversos.
Gran parte de estas investigaciones confluyen en una articulación entre la ciencia pública y el ámbito privado, en donde los científicos se dedican a realizar estudios que ayudan a realizar prácticas sustentables, disminuyendo el daño producido en el ambiente y beneficiando a los actores privados (productores y bodegas) que son los encargados de tomar decisiones sobre el manejo de estos ambientes, favoreciendo en última instancia a la sociedad en su conjunto. Esta articulación nos permite poder avanzar en el conocimiento que tenemos sobre las comunidades de arañas presentes en los viñedos y sobre los servicios ecosistémicos que brindan.
*El autor es doctor en Biología. Además es investigador asistente de Conicet en el Laboratorio de Entomología, Iadiza CCT-Mendoza.
Producción y edición: Miguel Títiro - [email protected]