Cuando una prenda se desgasta o su estilo deja de estar de moda, solemos buscar reemplazos sin pensar en alternativas más sostenibles. Mientras algunos prefieren donarlas, otros las dejan olvidadas en el placard. Sin embargo, con algunos cortes estratégicos y un poco de costura, podés reciclar tu prenda favorita y convertirla en una blusa única y moderna.
El reciclaje de ropa en desuso gana popularidad como parte de la renovación del guardarropa.
Paso a paso para el proceso de reciclaje
Paso 1: Seleccionar y hacer los primeros cortes
Elegí la remera que querés reciclar y realizá los siguientes recortes:
Paso 2: Preparar las piezas para la transformación
- Eliminá las partes recortadas que no se van a usar y quedate con la base de la nueva remera.
- Cortá la cinta más gruesa por la mitad en ambos lados.
- En las dos tiras delgadas, hacé un recorte de un solo lado y estiralas para que tomen la forma de un cordón. Hacé un nudo en los extremos para darles firmeza.
Paso 3: Coser y estructurar la camiseta
- Utilizá una máquina de coser para reforzar los bordes grandes en la parte de los hombros y el borde inferior de la remera. Uno de los hombros debe quedar con un diseño caído.
- Tomá las cintas más gruesas y coselas en los costados de la camiseta. Para asegurarte de que queden bien fijas, pasá la máquina de coser tanto por los bordes como por el centro de cada cinta.
- Si querés mayor precisión, podés marcar con tiza los puntos exactos donde vas a coser antes de comenzar.
Paso 4: Ajuste final y detalles decorativos
- Pasá los cordones con nudos a través de los costados en el paso anterior.
- Ajustalos estirándolos para generar un efecto fruncido en la cintura, dándole a la prenda una forma de acordeón.
- Una vez finalizado este paso, ya tendrás lista tu nueva remera personalizada.
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Cómo reciclar las remeras que ya no usas. Fuente: El Colectivo
Cómo combinar tu nueva remera reciclada
Gracias a estos simples trucos, transformaste una remera común en una camiseta moderna. Para sacarle el máximo provecho, podés combinarla con:
- Jeans de tiro alto para un look casual y relajado.
- Pantalones vaqueros o de tela para un outfit más sofisticado.
- Polleras o shorts blancos, ideales para los días calurosos de primavera-verano.
