Este martes dará inicio el juicio técnico contra Leopoldo Luque y Agustina Cosachov, los dos principales acusados por la muerte de Diego Armando Maradona, ocurrida el 25 de noviembre de 2020 en un country de Tigre. El proceso se llevará a cabo en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) número 3 de San Isidro, con una pena en juego que podría alcanzar hasta 25 años de prisión.
Desde las 9:30 de la mañana, Luque y Cosachov, junto a otros profesionales de la salud, enfrentarán el juicio bajo la figura de "homicidio simple con dolo eventual". Entre los imputados también se encuentran: el enfermero Ricardo Almirón, su jefe Mariano Perroni, el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna y la médica coordinadora de Swiss Medical, Nancy Edith Forlini.
Leopoldo Luque y Diego Maradona
El neurocirujano Leopoldo Luque junto a Diego Maradona
La enfermera que enfrentará un juicio por jurado
Además, en el segundo semestre del año, Gisela Dahiana Madrid, otra de las enfermeras que atendió a Maradona, será sometida a un juicio por jurados populares, una modalidad distinta al juicio técnico que enfrentan los demás acusados.
De qué murió Diego Maradona
La leyenda del fútbol murió a los 60 años durante el mediodía del 25 de noviembre de 2020 en un country de Tigre por un "paro cardiorrespiratorio secundario a edema agudo de pulmón producido por insuficiencia ventricular izquierda aguda".
De qué se acusa a cada uno de los imputados
- Leopoldo Luque: el hombre de 43 años era el médico personal de Maradona y fue quien solicitó la externación del oriundo de Villa Fiorito tras la cirugía por el hematoma subdural. Según fuentes de la causa, hay audios que le habría mandado a la víctima durante los días previos al fallecimiento.
Los fiscales Cosme Iribarren, Laura Capra y Patricio Ferrari consideran que el neurocirujano omitió ofrecer información sobre la salud de Diego a Dalma, Gianinna y Jana, además de que habría falsificado una firma del ex entrenador en un pedido de historia clínica tras la internación en la clínica de Olivos.
En tanto, Luque está imputado de restarle importancia a los síntomas compatibles con una insuficiencia cardíaca, no seguir los controles ni convocar a especialistas.
- Agustina Cosachov: otra de las acusadas más complicadas, la psiquiatra está imputada por haber falsificado presuntamente un certificado médico de una visita que nunca realizó. La profesional indicaba a los enfermeros qué dosis y qué medicamentos debían proveerle al exjugador de Boca.
Agustina Cosachov, la última mujer cercana al Diez
Agustina Cosachov, la médica psiquiatra que medicó al 10 antes de su muerte.
La Fiscalía sostiene que Cosachov, de 40 años, no reguló la ingesta de la medicación de forma personal y aseguró a los hijos de Maradona que lo que ocurría era consecuencia de "la espontánea decisión del paciente".
- Ricardo Almirón: el enfermero, que en los últimos días designó a Rodolfo Baqué y Martín Miguel de Vargas como sus dos nuevos defensores (ya era asesorado por Franco Chiarelli), se encuentra acusado de no cuidar a Maradona (al igual que Gisela Madrid).
El hombre de 41 años considera que "Pelusa" no quería que ingresen a la habitación y los rechazaba. Una orden que habrían recibido de los médicos era "no molestar al paciente".
- Pedro Pablo Di Spagna: el médico de 52 años está sindicado de no controlar el estado de salud del astro argentino, al tiempo que, según la acusación, solo habría concurrido en dos ocasiones a la casa del country de Tigre.
La primera vez fue el 12 de noviembre, cuando controló al ex entrenador de Gimnasia y Esgrima La Plata de forma personal y ordenó que se realice una serie de estudios, tales como laboratorio, placa de tórax, electrocardiograma, ecodoppler. El facultativo recomendó que se integre al personal de salud un nutricionista porque ese día Maradona estaba constipado tras comer brócoli con camarones a la provenzal.
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El masivo funeral de Diego Maradona en Casa Rosada.
La segunda oportunidad tuvo lugar el 18 de noviembre, siete días antes del deceso, donde afirmó que no pudo chequear a Diego porque "no se dejó".
Los fiscales remarcan que Di Spagna nunca se aseguró de que los análisis indicados se hayan llevado a cabo y por ende no controló la situación.
- Carlos Díaz: el psicólogo atendió al campeón del mundo en México 1986 por pedido del abogado Matías Morla. Según figura en su cuenta de LinkedIn, Díaz estudió en la Universidad del Salvador entre 2011 y 2016 y desde 2015 trabaja en la Asociación Civil Íntegra.
De acuerdo a su declaración, "nunca pudo haber influido en la muerte" de Maradona: "Muchas cosas me llamaron la atención de las que vi. En primer lugar, que un paciente viva con empleados y no con su familia es algo que a mí me llama la atención. Es la primera vez que veo esto en la práctica clínica. Por otro lado, en la reunión en la Clínica Olivos, donde estuvieron todos, algunos de sus familiares luego no participaron en ningún otro momento del tratamiento ni un solo día".
- Nancy Edith Forlini: la mujer de 56 años era la coordinadora de la gerencia de cuidados domiciliarios en la prepaga Swiss Medical.
Tras la última cirugía, la empresa de medicina prepaga le brindó servicios de cuidado a Maradona en el country de Tigre. En un escrito, Forlini acusó a Luque y Cosachov de ser quienes tomaban las decisiones sobre los tratamientos.
- Mariano Perroni: el jefe de los enfermeros Almirón y Madrid se encargaba de coordinar las tareas a los dos profesionales imputados. Para los fiscales, escribió planillas con información que no coincidía con "el real estado y atención médica que Diego Armando Maradona recibía".