Estas galletitas sin harina ni azúcar es una de esas recetas rápidas, económicas y deliciosas. En pocos minutos vas a tener un postre o merienda natural.
Si estás buscando una opción dulce, rica y sin culpa, estas galletitas de frutilla sin harina ni azúcar son perfectas. Se preparan en pocos minutos estas recetas, no requieren amasado y son ideales para acompañar el mate, el café o como snack saludable a media tarde.
1 taza de frutillas frescas o congeladas
1 taza de avena (en hojuelas o molida)
1 huevo
2 cucharadas de aceite neutro (de girasol o de coco)
Endulzante natural a gusto (stevia, miel o pasta de dátiles)
1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
1 pizca de polvo de hornear
Preparar las frutillas: lavá y picá las frutillas en trozos pequeños. Si usás frutillas congeladas, descongelalas previamente y escurrilas bien.
Armar la mezcla: en un bol, colocá el huevo, el aceite y el endulzante. Batí ligeramente y agregá la avena, el polvo de hornear y la vainilla. Mezclá hasta integrar.
Incorporar las frutillas: añadí los trozos de frutilla a la mezcla y revolvé con una cuchara hasta que queden bien distribuidos.
Dar forma a las galletitas: con ayuda de una cuchara, colocá porciones sobre una placa con papel manteca o ligeramente engrasada. Aplastalas un poco para darles forma.
Hornear: cociná en horno medio (180 °C) durante 12 a 15 minutos, hasta que estén doradas en los bordes.
Dejar enfriar: una vez listas, dejalas enfriar completamente para que tomen consistencia.
Si preferís una textura más suave, podés procesar parte de la avena antes de usarla.
También podés reemplazar las frutillas por arándanos, banana o manzana rallada.
Guardalas en un frasco hermético hasta 5 días o freezalas para tener siempre a mano un snack saludable.