Este tipo de plástico no solo sirve para envolver los electrodomésticos frágiles de tu casa, sino que pueden reutilizarse durante el invierno.
Este plástico es una solución para el alto consumo de la calefacción.
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WEB Este plástico es una solución para el alto consumo de la calefacción.
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WEB Este plástico es una solución para el alto consumo de la calefacción.
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WEBEl plástico de burbujas no es necesario tirarlo después de haber comprado un nuevo televisor u otro electrodoméstico. Por eso, con un poco de creatividad puede ser una pieza clave para que el frío del exterior de tu casa no ingrese y así mantener un ambiente agradable.
Estos elementos pueden tener otra vida en el hogar y te ayudarán al ahorro de energía y a pasar los días de frío en un ambiente más cómodo. Con solo simples pasos e ingenio, podrás reutilizar este tipo de plásticos.
Este plástico de burbujas como comúnmente lo conocemos, o film alveolar para ser más específicos, no solo tiene un uso de protección de objetos frágiles, sino que puede mejorar la calefacción de nuestra casa cuando las filtraciones de nuestras ventanas hace que entre el viento frío y en días de bajas temperaturas podrás sufrirlo.
Sólo necesitás un plástico de burbujas con la medida de tu ventana y un rociador con agua:
Esto hará que logre aislar el frío y no se filtren las bajas temperaturas de afuera. Eso sí, deberás usarlo durante todo el invierno para asegurar pasar un mejor invierno dentro de tu casa. En caso de que por accidente se rompa o despegue, tendrás que volver a realizar el mismo procedimiento.
Siempre es importante revisar con un plomero o gasista matriculado los artefactos para calentar el hogar y si tu casa es grande y tenés radiadores para la calefacción, es recomendable apagarlo en zonas donde no pasas mucho tiempo y mantenerlos prendidos en lugares de mayor concentración. Eso aumentará la temperatura rápidamente y lograrás una mejor economía. Estos radiadores deberán mantener una limpieza para que su función sea más práctica y segura.
Para los que calientan sus casas con sistemas de calefacción y producción de agua caliente como las calderas de consensación, es ideal comprobar que el gas natural se queme en el quemador, genere calor y luego se transfiera al agua que circula por el impulsor de calor para reducir el consumo de gas y las emisiones de CO2.