Existen alimentos que ayudan a limpiar las arterias, reduce el colesterol malo y cuida el corazón, según varios estudios con respaldo científico en la salud.
Según la ciencia, cuál es el fruto seco que limpia las arterias y protege el corazón
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Una alimentación equilibrada puede ser clave para prevenir enfermedades. Algunos alimentos, respaldados por estudios de la ciencia, ofrecen beneficios concretos para la salud cardiovascular. Incluir ciertos frutos secos en la dieta diaria puede ayudar a mantener las arterias limpias y el corazón protegido, sin recurrir a fármacos.
Las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la principal causa de muerte en el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Muchas de estas afecciones se relacionan con la acumulación de placas en las paredes arteriales, lo que impide una correcta circulación sanguínea. Esta obstrucción, conocida como aterosclerosis, puede derivar en infartos, accidentes cerebrovasculares o insuficiencia cardíaca.
La buena noticia es que hay factores modificables que pueden prevenir este tipo de problemas, y la alimentación es uno de los más importantes. Según la Harvard T.H. Chan School of Public Health, una dieta equilibrada rica en grasas saludables, fibras y antioxidantes puede reducir drásticamente el riesgo de enfermedad coronaria.
Uno de los alimentos más estudiados por sus efectos beneficiosos en el sistema cardiovascular es la nuez. Diversas investigaciones han demostrado que este fruto seco no solo aporta energía y nutrientes esenciales, sino que también contribuye a la limpieza de las arterias y a la reducción del colesterol LDL (colesterol "malo"), mientras eleva el HDL (colesterol "bueno").
Un estudio publicado en la revista Circulation (Asociación Americana del Corazón) encontró que consumir entre 30 y 60 gramos diarios de nueces durante seis semanas disminuyó los niveles de colesterol total y triglicéridos, además de mejorar la función endotelial, clave en la salud arterial. Además, la Universidad de Loma Linda (California) demostró que incluir nueces en una dieta baja en grasas saturadas produce efectos antiinflamatorios, lo que es crucial para prevenir el daño vascular.
Las nueces son ricas en ácido alfa-linolénico (ALA), un tipo de omega-3 vegetal, antioxidantes como la vitamina E, y fitoesteroles que bloquean parcialmente la absorción del colesterol en el intestino. Estos componentes ayudan a disminuir la presión arterial, mejorar la elasticidad arterial y reducir los procesos inflamatorios crónicos.
A pesar de su alto contenido calórico, las nueces son consideradas una grasa "buena" y saciante. Incluir un pequeño puñado diario (alrededor de 6 a 8 unidades) puede tener un gran impacto en la salud sin generar aumento de peso, siempre que se mantenga una dieta balanceada. Lo importante es elegir versiones sin sal añadida ni azúcar y consumirlas crudas o tostadas.
Se pueden incorporar en ensaladas, yogures, licuados, como colación o incluso en preparaciones saladas. También son una excelente alternativa para reemplazar snacks ultraprocesados o postres industrializados.
Las nueces no son una moda pasajera ni una solución milagrosa. Son un alimento respaldo por décadas de evidencia científica, capaz de prevenir enfermedades cardíacas, mejorar la circulación y proteger las arterias de forma natural. Incluirlas en la dieta diaria puede ser una de las decisiones más simples y poderosas para cuidar el corazón a largo plazo.