El cierre del año deja en los hogares una cantidad visible de restos que no siempre recibe un segundo destino y entre esos elementos aparecen los corchos de vino que acompañaron brindis familiares y encuentros con amistades durante las fiestas. Muchas casas optan por conservarlos y poder reciclar en piezas decorativas que acompañan la llegada del Año Nuevo.
El reciclaje de corchos se afianza como una alternativa accesible que no exige experiencia previa ni grandes gastos. Su textura natural aporta un carácter visual que se integra con distintos estilos decorativos y su tamaño facilita el armado de adornos que encuentran lugar tanto en mesas principales como en repisas y paredes.
El gesto de reutilizar estos residuos reduce la cantidad de desechos domésticos y al mismo tiempo construye una narrativa personal que acompaña la celebración de un nuevo ciclo. Cada pieza conserva la memoria de los encuentros recientes y se convierte en un detalle que transmite cercanía y cuidado por el entorno.
Reciclaje
Corchos reciclados permiten un truco práctico que mejora decoración y orden en el hogar.
Materiales necesarios
– Corchos de vino
– Frascos de vidrio, bowls transparentes o bandejas claras
– Velas blancas, beige o doradas
– Adhesivo apto para manualidades
– Hilo, tanza o cuerda fina
– Tijera o cúter
– Regla
– Lápiz
corchos de vino
Paso a paso
Centros de mesa
- Seleccionar un frasco, bowl o bandeja transparente.
- Limpiar y secar los corchos.
- Cortar algunos corchos en rodajas si se busca variar texturas.
- Distribuir los corchos dentro del recipiente hasta cubrir la base.
- Colocar una o más velas sobre los corchos.
- Ajustar la posición hasta lograr una composición equilibrada.
Números del año
- Dibujar en una hoja el contorno de los números del año a realizar.
- Presentar los corchos sobre el dibujo para definir la forma.
- Aplicar adhesivo en los puntos de contacto.
- Unir los corchos hasta completar cada número.
- Dejar secar completamente.
- Pintar si se desea una terminación metalizada.
- Ubicar los números sobre una superficie visible.
Guirnaldas colgantes
- Cortar tramos de hilo, tanza o cuerda según el largo deseado.
- Perforar los corchos con cuidado.
- Enhebrar cada corcho en el hilo manteniendo espacios regulares.
- Anudar los extremos para fijar la distancia entre piezas.
- Colgar la guirnalda en puertas, ventanas o paredes.
- Integrar luces o detalles decorativos si se busca mayor efecto visual.