El presidente reaccionó al tenso debate entre Perochena y el director de la Casa Histórica de Tucumán, José María Posse. Referentes de varios ámbitos criticaron o apoyaron a la joven.
Javier Milei cruzó a la historiadora Camila Perochena.
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Ilustración El cruce entre Javier Milei y la historiadora Camilia Perochena desató una ola de reacciones en redes. Luego de que el presidente la tildara de “patética” tras un debate con el director de la Casa Histórica de Tucumán, referentes de diversos ámbitos salieron a apoyarla o, por el contrario, a profundizar las críticas.
Todo comenzó tras un tenso ida y vuelta entre Perochena y José María Posse, el administrador de la casa colonial. El intercambio se dio en el programa de María Laura Santillán en LN+ y rápidamente tomó fuerza en las redes sociales cuando Milei intervino en la red social X con un comentario polémico.
El mandatario republicó un video del cruce con un duro mensaje: “PATÉTICA: se jacta de saber historia y arranca negando un dato base. Si llega a revisar las series de Madison le colapsará el cerebro (resulta claro que lo tiene lleno de parásitos)... Fin”.
El video lo había subido el periodista Diego Papic, quien agregó un comentario que fue apoyado por el mandatario nacional: “Le tapó la boca con argumentos el director de la Casa Histórica de Tucumán y ella esperó a que no esté [estuviera] para desacreditarlo. Muy feo e infantil”, sentenció.
Ante esto, Perochena no se quedó callada y desde su cuenta respondió defendiéndose: “Argentina podía ser rica en 1910, pero eso no la convertía en potencia mundial. Los historiadores no estamos para avalar los mitos que construyen los liderazgos mesiánicos que abundan en nuestra historia”, adujo.
Perochena es autora de “Cristina y la historia: el kirchnerismo y sus batallas por el pasado”, además de tener una columna semanal en el programa Odisea Argentina, del periodista (uno de los principales enemigos del oficialismo) Carlos Pagni. En tanto, su exposición pública la colocó en la mira del mileismo.
El subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, escribió: “Como llora la casta. Tu visión de la historia está sesgada por la niebla ideológica. Cuando quieras lo debatimos en público”. En el mismo tono, el diputado Fernando Iglesis ironizó: “Querida Camila: tu trabajo ha sido siempre avalar desde la academia el liderazgo mesiánico de Perón. Date cuenta, amiga”.
También se sumó a las críticas la psicólgoa y militante Jorgelina Kos Grabar, quien dijo: “Además de ser una académica poco relevante por su formación e inclinación ideológica, también milita en función de ello. No veo por qué no hay que responderle si le gusta exponerse. No tiene privilegios”.
En contraste, numerosas voces salieron en defensa de la historiadoras. “Mi solidaridad con Camila Perochena por haber sido sometida al trato cruel e inhumano de tener que lidiar con esta caterva de brutos”, expresó Pedro Caminos. Por su parte, el exministro de Cultura de Cambiemos Pablo Avelluto fue directo: “Nos gobiernan ignorantes que retuitean a ignorantes”.
La escritora Claudia Piñeiro opinó: “Todo quien opina diferente al gobierno y sus acólitos es insultado. Les debe dar resultado entre unos pocos de ellos, para el resto cada vez más claro dónde está el patetismo”.
El historiador Fabio Wasserman también apuntó contra Milei: “El presidente y sus perritos falderos atacan a historiadores. La economía debe andar bárbaro”. Y el ensayista Hugo Vezzetti concluyó: “Lo patético es tener un presidente que desprecia la disciplina histórica y pretende reemplazarla por la simplificación ideológica y política”.