En medio del escándalo que derivó en la renuncia de la jueza Julieta Makintach, quien hasta ayer presidía el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, Guillermo Coppola rompió el silencio y apuntó directamente contra la magistrada. “No puede descansar en paz”, expresó el martes en diálogo con América TV, en alusión al eterno capitán de la Selección Argentina.
Makintach, integrante del Tribunal Oral en lo Criminal N° 3 de San Isidro, fue apartada del proceso judicial tras la difusión de un tráiler y un guion que la mostrarían protagonizando un documental no autorizado sobre el juicio. Las imágenes, que generaron un fuerte repudio, incluyen escenas de Gianinna Maradona y Verónica Ojeda llorando desconsoladamente, así como declaraciones de la propia jueza, que fueron consideradas fuera de lugar.
Guillermo Coppola, tras la salida de la jueza Makintach: "Maradona no puede descansar en paz"
Coppola habló sobre el caso Maradona.
"Hay un apetito de fama, trascendencia, dinero e interés", disparó Coppola, visiblemente molesto. "Aparentemente está prohibido entrar al juicio con cámaras o filmar. Ella fue quien lo determinó, y es raro todo. De lejos, es feo", agregó, sin ocultar su indignación.
Consultado sobre si había hablado recientemente con los hijos del Diez, Coppola explicó: "En estos días, no. Estaba esperando a qué pasaba hoy. Ellos saben que pueden contar conmigo".
Además, manifestó su profunda preocupación por la posible nulidad del juicio, que podría definirse el próximo jueves: “Me cuesta creerlo y digerirlo. Volver a repetir todo lo que se hizo, el sufrimiento, ver a sus hijos quebrarse cuando les tocó declarar... realmente me pone mal, me entristece".
La jueza Makintach aceptó la recusación
Por su parte, Makintach defendió su accionar hasta último momento. "No hay irregularidad, no hay delito, no hay mal desempeño. Lo que hay es una gran operación mediática para coaccionar y apartarme de este debate. ¿Y saben qué? Yo no me voy a excusar, quiero dejar en claro que no me voy a apartar", argumentó durante la audiencia. Sin embargo, tras el pedido unánime de las partes, la jueza finalmente aceptó su recusación: “Espero que el juicio pueda seguir sin mí, que se sepa la verdad y no haya más demoras”, cerró.
El juicio investiga las responsabilidades en la muerte de Diego Maradona, ocurrida el 25 de noviembre de 2020, a los 60 años, y apunta principalmente contra los profesionales de la salud que estuvieron a cargo de su tratamiento en los últimos días de vida.