No pudo ser: ni la juntada de los Spider-Man ni la de Fititos fueron certificadas por el Récord Guinness

El domingo 29 de octubre, miles de personas disfrazadas como el icónico superhéroe de Marvel, Spider-Man se reunieron en el Obelisco para intentar romper el récord de la juntada de “Hombre Arañas” más grande del mundo. En una línea similar, el domingo 5 de noviembre se congregaron más de 600 “Fititos” en la localidad de Caseros con el objetivo de obtener el título de la mayor concentración de estos vehículos.

Si bien en un momento se difundió que ambas convocatorias lograron su cometido, la empresa Guinness World Records anunció ayer que ni los Spider-Man ni los Fiat 600 lograron el título que buscaban. En tanto, expresaron que se trató de “publicidad falsa tras la circulación de noticias que contienen información incorrecta”.

La autoridad mundial en verificación y archivo de récords confirmó en un documento que “éstos no fueron intentos oficialmente reconocidos por Guinness World Records. Ni los organizadores del evento de Obelisco, ni la dirección del Museo del Fitito, completaron una propuesta de intento de récord oficial, por lo que no recibieron los reglamentos ni lista de evidencias necesarias para intentar estos récords, ni la licencia para utilizar nuestra marca registrada para promover los mismos”.

A falta de la presentación de la documentación pertinente, la empresa no puede ni evaluar ni certificar los intentos de récord que tuvieron lugar los últimos dos domingos. Sin embargo, aclararon que “tanto los organizadores del evento de Obelisco, como la dirección del Museo del Fitito pueden ponerse en contacto con nosotros para presentarnos su propuesta de intento de récord oficial de cara a proceder al análisis y potencial oficialización (o rechazo) de la misma”.

Los “Hombre Araña” se reunieron en el Obelisco en respuesta a una propuesta del influencer argentino Uki Deane, que buscaba superar el récord anterior de 685 personas disfrazadas de Spider-Man, establecido en Malasia. La iniciativa se viralizó a través de las redes sociales, donde alentó a los internautas a unirse al desafío, ya sea con disfraces improvisados o incluso pintando sus rostros.

Por su parte, la colorida caravana de más de 600 Fiat 600 partió desde la pista del Autódromo de la Ciudad de Buenos Aires hasta congregarse en el Playón Municipal de Tres de Febrero. En ambos eventos participaron cientos de personas sin distinción de género ni edad.

En este sentido, Guinness World Records destacó que para ellos es muy importante que “el mundo sepa que todos, sin distinción alguna, pueden tener la oportunidad de convertir lo extraordinario en oficial”.

Por este motivo, informaron que individuos de cualquier parte del mundo pueden aspirar a romper un récord o marcar un precedente. “Los récords que monitorizamos cubren una variada gama de superlativos para que, sin definir el éxito de una manera convencional o limitada, todas las personas puedan reconocer su potencial y miren el mundo de una manera diferente”, animó la empresa.

Las solicitudes de récord se pueden conseguir a través de la página oficial de la empresa (www.guinnessworldrecords.es) y remarcaron que ninguna otra organización mundial está avalada para certificar y/o otorgar títulos bajo el nombre de Guinness World Records.

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