Cuando hace calor el cuerpo tiene que trabajar más para eliminar el exceso de calor, lo que puede dificultar el proceso de conciliar el sueño y mantenerlo durante la noche.
Cuando hace calor el cuerpo tiene que trabajar más para eliminar el exceso de calor, lo que puede dificultar el proceso de conciliar el sueño y mantenerlo durante la noche.
“Las altas temperaturas pueden provocar que nos despertemos con más frecuencia durante la noche, lo que puede afectar la calidad del sueño”. comenta Matías Burstein.
1. Encontrar el colchón adecuado para el verano puede contribuir a mejorar el descanso y disfrutar de un sueño reparador durante las noches calurosas.
2. Utilizar ropa de cama transpirable: Elegir ropa de cama hecha de materiales naturales como algodón o lino puede ayudar a absorber el sudor y mantenerte fresco.
3. Evitar la cafeína y el alcohol por la tarde. Estas sustancias pueden interferir con el sueño.
4. Tomar una ducha fresca antes de acostarse: Esto puede ayudar a bajar la temperatura corporal y relajar los músculos.
5. Beber suficiente agua durante el día: La hidratación es fundamental para el buen funcionamiento del cuerpo, incluyendo el sueño.
En definitiva, el verano no tiene que ser un enemigo del buen dormir. Con pequeños cambios en la rutina y la elección de productos adecuados, se puede disfrutar de un sueño reparador durante las noches calurosas y despertar con energía para disfrutar al máximo del verano.
El descanso es fundamental para la salud física y mental y priorizar un buen dormir permite sentirse mejor, tener más energía y disfrutar de una vida más plena.
Asesoró: Calm