La fiscal de Instrucción de Malargüe, Andrea Lorente, presentó su renuncia el viernes pasado y el gobernador Alfredo Cornejo no la ha aceptado aún.
El gobernador Alfredo Cornejo y los ministros de la Corte en el acto de inicio del año de la Justicia.
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La fiscal de Instrucción de Malargüe, Andrea Lorente, presentó formalmente su renuncia al gobernador Alfredo Cornejo el viernes pasado, luego de que el propio Procurador de la Suprema Corte, Alejandro Gullé, impulsara su destitución a través de un petitorio de Jury de Enjuiciamiento por “mal desempeño” en su cargo.
El miércoles pasado, Cornejo la cuestionó públicamente por “pisar causas” y dijo que ameritaba su renuncia o el juicio político, para dejar su cargo.
Simultáneamente el jefe de los fiscales presentó una durísima denuncia, en la que advierte que la fiscal “evidencia no solo desconocimiento del Derecho, sino también el negligente cumplimiento de sus funciones” sobre causas de gravedad como abuso sexual a menores y violencia de género, pero también de investigaciones contra funcionarios públicos.
Ante la exposición mediática que tomó su caso, Lorente presentó su renuncia el viernes pasado y el documento fue receptado por la ministra de Seguridad y Justicia, Mercedes Rus.
Según pudo saber Los Andes, el gobernador se inclinará por aceptarla y podría formalizarla al regreso de su viaje por Brasil, o bien hacerlo en su lugar, la vicegobernadora Hebe Casado que está a cargo del Poder Ejecutivo.
Mientras tanto, la fiscal debe seguir en sus funciones y el pedido de Jury sigue su curso. De hecho, el próximo 31 de julio tiene fecha para que el cuerpo lo analice en reunión secreta y vote por su admisibilidad.
El Jury de Enjuiciamiento está compuesto por los siete miembros de la Suprema Corte de Justicia, siete senadores y siete diputados provinciales. Para aceptar el proceso de Jury se deben reunir 11 votos de 21.
En el texto enviado al Gobernador, al que tuvo acceso Los Andes, la fiscal dice: “Ya que si bien intenté dar todo de mí dentro de lo establecido legalmente en el desempeño de mis funciones para lograr hacer una diferencia sustancial en el bienestar de la comunidad malargüina, (...) resulta evidente que no ha sido suficiente para lograrlo, por lo que siguiendo con mi interés de llegar a ese bienestar, es que entiendo que mi renuncia indeclinable es el mejor camino para lograr de esta manera que otro profesional pueda intentarlo”.
“Agradeciendo la oportunidad otorgada con su voto de confianza y lamentando que por cuestiones personales y de salud entre otras, no poder estar a la altura de las circunstancias es que solicito se acepte esta renuncia al cargo de Fiscal de Instrucción y Penal de Menores de la Unidad Fiscal de Malargüe”, completa.